Alfredo Fermín || afermin@el-carabobeno.com
Ricardo Maldonado, exrector de la Universidad de Carabobo,
exhortó a que haya una posición más activa al lado de El Carabobeño, en defensa
de la democracia y de la poca libertad que queda en un país con sus
instituciones acorraladas
Francisco Ameliach -expresó Maldonado- no puede desligarse
de esta lucha porque él tiene una poderosa influencia, más allá de la de
Gobernador, y puede lograr que en el estado haya libertad de expresión con El
Carabobeño como diario histórico.
Maldonado no tiene dudas de que la campaña del Ejecutivo
Nacional en contra del Diario del Centro, para hacerlo desaparecer como medio
impreso, es una sanción a la posición admirable que ha tenido este diario en
defensa de la libertad de expresión. “Este Gobierno ha llegado a tal nivel de
intolerancia que no acepta la disidencia. Considera obligatorio que los medios
tienen que repetir lo que ellos quieren, como hacen con las estaciones de
radio, televisión y periódicos que han
comprado para acallarlos”.
El exrector observó que cuando un Gobierno pretende que solo
se publique lo que le interesa, atenta contra la democracia que se basa en la
libertad de expresión. “En un país que está a punto de implosión es necesario
conocer todos los puntos de vista, para encontrar solución a los problemas”.
Sin embargo, porque El Carabobeño es un diario que no ha
sido genuflexo, el Gobierno le niega el
papel que tienen por demás otros periódicos que no tienen historia ni
trascendencia, sostuvo Maldonado. “Por eso, todos los carabobeños debemos
ponernos al lado de este periódico, que con valentía, disminuyendo cada día el
tamaño de sus ediciones, mantiene una línea correcta para que resplandezca la
luz, y para que los medios de comunicación recuperen su independencia, como
sucedió en los países suramericanos después del derrocamiento de dictaduras”.