dpa
La española Garbiñe Muguruza dio un nuevo paso en su
vertiginoso ascenso hacia la elite del tenis al derrotar a la polaca Agnieska
Radwanska y avanzar a la final del torneo de Pekín, resultado que la hará subir
hasta el cuarto lugar del ranking.
Muguruza batió a Radwanska por 4-6, 6-3 y 6-4 y en la final
del certamen chino se medirá mañana a otra jugadora en ascenso, la suiza Timea
Bacsinszky, que previamente derrotó a la serbia Ana Ivanovic por 5-7, 6-4 y
6-1.
Pese a las molestias que arrastra en el tobillo y el
cansancio, Muguruza consiguió remontar un set adverso y superar por cuarta vez
consecutiva a la octava del ranking.
«Estoy muy orgullosa de conseguir alcanzar la final
porque significa que he ganado muchos partidos. Tras tener que retirarme en
Wuhan llegué con mal sabor de boca y volver a empezar todo de nuevo es duro.
Pero estoy orgullosa de haber podido mantener el nivel de juego y mental y
estar tan motivada hasta el final», comentó la hispano-venezolana tras su
victoria en dos horas y 20 minutos.
La finalista de Wimbledon, que esta semana se aseguró un
cupo en el Masters de fin de año en Singapur, espera un encuentro muy difícil
ante Bacsinszky, quien con su pase a la final se metió por primera vez en el
«top ten».
«Me espero cualquier cosa. Conozco a Timea bien. La he
visto jugar hoy y se que es una jugadora muy inteligente. Todos los partidos
que he jugado contra ella ha sido durásemos. Quiero el trofeo, lo quiero tanto
que voy a a seguir luchando a ver que pasa», señaló Muguruza.
Garbiñe y Bacsinszky se enfrentaron en dos ocasiones, con
dos victorias para la española. Ambas fueron este año y en Grand Slams: el Abierto
de Australia y Wimbledon.
En caso de conseguir su primer título de la temporada,
Muguruza se colocaría a un sólo punto de la rusa Maria Sharapova, tercera del
ranking de la WTA.