Nadal dijo que hubo «momentos buenos y malos» en su paso por Madrid y defendió que ser el séptimo favorito del mundo «no es un desastre». (Foto EFE)
EFE
El español Rafael Nadal dijo que el torneo de Madrid de la semana pasada fue «bueno para la confianza» y esperó que su juego en el Master 1000 de Roma «pueda confirmar» ese avance en un momento en el que se siente optimista.
«La semana pasada fue buena para mí, por la confianza y por muchas otras cosas, y espero confirmarlo y mejorarlo esta semana. Estas son mis expectativas», dijo el mallorquín en una rueda de prensa en el Foro Itálico.
«Obviamente ahora mismo no soy tan bueno como fui, no sé si mañana lo seré porque no sé qué pasará mañana», sentenció Nadal, quien repasó que en Barcelona jugó mal pero lo hizo bien en Madrid y se declaró optimista para esta semana.
«En Roma espero lo de cada año, es un torneo especial, uno de los mejores del año sin duda y uno al que le tengo gran cariño porque he tenido muy buenos resultados en el pasado», afirmó.
«(En Roma espero) lo de siempre, empezar mañana bien y vamos a ver si puedo hacer un comienzo bueno, tener buenas sensaciones y, a partir de ahí, ver lo que pasa. Día a día como siempre», destacó el español sobre su juego en el Foro Itálico.
Añadió que la responsabilidad de las victorias y las derrotas es siempre suya y no del entrenador, con quien aseguró querer seguir trabajando, pero rechazó que «las cosas no estén yendo bien».
«Si las cosas no van bien la culpa es siempre mía y no del entrenador, al igual que cuando las cosas va bien es principalmente por mí, aunque sea un trabajo de muchas personas», incidió.
Nadal dijo que hubo «momentos buenos y malos» en su paso por Madrid y defendió que ser el séptimo favorito del mundo «no es un desastre».
Del Abierto de Roma dijo que se trata de un torneo «con mucha historia» en el que está concentrado para «jugar bien», algo que se dijo seguro de poder hacer.
«Estaba mucho más preocupado hace un mes que ahora. Esta semana estoy optimista», subrayó.
Preguntado por su descenso al séptimo puesto en la clasificación mundial, Nadal dijo que «nada ha cambiado» y ha seguido con su rutina habitual: «Entrenar, dar conferencias de prensa y seguir trabajando».
