Felícita Blanco
La designación de un fiscal especial para que investigue la explosión
registrada el miércoles en la Penitenciaría General de Venezuela, dejando un
saldo no determinado de muertos y heridos, solicitó el Observatorio Venezolano
de Prisiones a la ciudadana Fiscal Luisa Ortega Díaz.
Humberto Prado, director general del OVP, también planteó la necesidad
de que investiguen los medios por los cuales ingresaron los explosivos que
causaron esa tragedia.
Se habla de explosión de granadas, bombonas de gas o C4 debido a los
daños ocasionados; y especulan conque hay 11 ó más de 20 muertos.
El recinto carcelario permanece bajo control de los presos, quienes
reúnen en un sitio los cadáveres para llevarlos a la morgue del Hospital
RanuarezBalza y los familiares conversan con los internos para agilizar el
traslado de los cuerpos.
Se dice que en el penal estaban cinco deportistas que no son reclusos y
se desconoce si se cuentan entre las víctimas.
Hasta el momento están identificados Ely Israel Morales Blanco y
RaylenIsmenia Polanco Castro, decoradores contratados para hacer los arreglos
en los espacios donde celebrarían el cumpleaños del pran “el guaira”. Dicho
evento no fue suspendido.
También murió Marco Antonio Texier Meneses, quien tenía registros
judiciales por robo agravado, en 2010.
Entre los heridos se mencionan: Yender García (25), Víctor Rebolledo (23),
Carlos Flores (22), Jaime Márquez (25), Michael Noguera, Wilder Palma (24),
Leomar Marcano (26), YefersonRodríguez (24), Alexander Méndez (23), Ronald
García (20), Cristian Escalona (21), YolitzaSiviram, Luis Alberto Valle, James Guzmán
(22), procesado por robo, y Alí Alejandro Cadenas (25), condenado a seis años
de prisión por robo agravado.
Unas 27 personas fueron llevadas al hospital de la zona y 18 de ellas son
internos. Entre los heridos se encuentran los organizadores de la fiesta y
jugadores de un torneo de fútbol en homenaje al cumpleañero.
Prado insta a las autoridades a oficializar las cifras de las víctimas (muertos
y heridos) yque para tranquilidad de cientos de familias se publique la lista
en las áreas externas del centro carcelario donde reina la incertidumbre.
Cuando los parientes preocupados
solicitan información los custodios les dicen que la situación está controlada.
¿Cuántos muertos debe haber para que
el Estado tome cartas en el asunto? En menos de una semana hemos denunciado que
dos reclusos fueron acribillados en la PGV, una huelga de sangre en el retén de
menores de Manzano, secuestro en Politachira, traslados arbitrarios en Nueva
Esparta y decapitados en PoliLara, señaló el denunciante.
Prado concluye en que “el Ministerio de
Servicio Penitenciario no controla los penales y como lo hemos denunciado,
estos están a merced de los pranes”.
