La Mesa de la Unidad Democrática (MUD) ha tenido que sortear
diversas dificultades desde que emprendió la activación de un referendo
revocatorio contra el mandato del presidente Nicolás Maduro. Actualmente, la coalición
opositora se encuentra esperando que el Poder Electoral comience la segunda
fase del proceso.
Un trabajo publicado en la versión digital de El Nacional,
señala que la MUD enfrenta 3 nuevos obstáculos en la segunda etapa del
referendo: que la recolección de 20% de las firmas sea por estado y no
nacional, que la jornada se haga en un solo día y no en 3, y que no se abran
los 14 mil centros de votación y 40 mil mesas, así lo advirtieron partidos como
Un Nuevo Tiempo (UNT) y el Movimiento Progresista de Venezuela.
Sumado a esto, el presidente de la
Asamblea Nacional (AN), Henry Ramos Allup, denunció que el Tribunal Supremo de
Justicia (TSJ) prepara una sentencia que “ordena otra vez la recolección de firmas”,
igualmente durante un acto en el Colegio de Abogados, dijo que el Gobierno
pretende retirarse de la Organización de Estados Americanos (OEA), cuyo
secretario general promueve la activación de la Carta Democrática
Interamericana a Venezuela.
A juicio del diputado del Movimiento Progresista, José Luis
Pirela, “si la Sala Constitucional suspende el revocatorio es porque el gobierno
juega al caos y a la violencia. 80% quiere que (Nicolás) Maduro salga del
poder, así que protestarían en las calles, algo que busca el gobierno para
infiltrar las manifestaciones, causar desórdenes y evitar el revocatorio y las
elecciones regionales”.
Con información de El Nacional