Oprah Winfrey
continúa explorando la religión y la espiritualidad en su nuevo proyecto como
productora y actriz.
La
magnate de los medios de comunicación presentó el primer episodio de su serie
“Greenleaf” el miércoles por la noche en una función privada en Soho House en California.
El programa, que sigue los dramas personales y la ética cuestionable de una
familia en el centro de una megaiglesia en Memphis, Tennessee, se estrena el
próximo mes por la cadena OWN de Winfrey.
Winfrey
desarrolló “Greenleaf” y se enfoca en la familia protagónica, encabezada por el
obispo James Greenleaf, un carismático predicador que vive en una finca
palaciega con empleados de tiempo completo. Pero su riqueza podría tener
orígenes inmorales, pues comienza a sudar cuando un político local dice que
está revisando las declaraciones de impuestos de las iglesias. Todos los hijos
adultos del obispo han seguido los pasos de su padre excepto por Grace quien se
fue de Memphis a Arizona en busca de una nueva vida y dejó de ir a la iglesia.
Winfrey
da vida a Mavis, la franca dueña de un bar que está distanciada de su hermana,
Lady Mae, la matriarca de los Greenleaf.
Winfrey
dijo que basó su personaje en su difunta amiga y mentora Maya Angelou: “Si Maya
tuviera un bar, sería Mavis”.
El
personaje de Winfrey aparece a lo largo de los 13 episodios de “Greenleaf”, que
ya tiene confirmada una segunda temporada. El papel recurrente representa su
regreso como actriz de televisión luego de casi 20 años.