Una cola se extendía en una de las calles principales del sector del sur de Valencia. (Foto Héctor Freile)
Sara Pacheco
Es día de gas en la comunidad Andrés Bello. Habitantes conocen la rutina. Madrugar, llevar su bombona y esperar tiempo indefinido. El día es fijo, la hora incierta.
Una cola se extendía en una de las calles principales del sector del sur de Valencia. Personas de todas las edades buscaban sombra ante el sol inclemente. Luego de varias horas, la encargada quien sostenía en su mano derecha una carpeta y hablaba por teléfono, puso sus ojos en blanco mientras recibía la noticia. “Mediodía”, masculló.
Cada uno de los presentes regresó cabizbajo a sus hogares mientras llegaba el mediodía con la bombona de gas a cuestas. «Uno está perdiendo su tiempo aquí, desde las cinco de la mañana haciendo cola», vociferó Luisa Montero. La situación se repite constantemente, el consejo comunal pidió seriedad a las autoridades.