Dayrí Blanco
El silencio predomina en la planta de Venezuela. 16 de 17 líneas de producción se mantienen apagadas. No hay materia prima para la mayoría de ellas. Solo acetaminofén en su versión de precio no regulado es elaborado en un único turno de trabajo, las otras dos jornadas fueron eliminadas.
La gerencia determinó no seguir la manufactura a pérdida. Por eso, aunque tienen insumos suficientes para mantener activas las máquinas de Atamel en gotas y jarabe pediátrico además del tradicional en pastillas, solo hacen en presentación “forte” para poder tener utilidad. Los otros 12 medicamentos que se pueden producir en el lugar se mantienen fuera del cronograma de la firma desde hace más de un año a la espera de divisas para la importación de materia prima.
Alí Mora, secretario general del sindicato, pidió a la empresa la reactivación de todas las líneas de acetaminofén. “Hay materiales suficientes para trabajar hasta el sexto mes del año con los tres turnos, y estamos a la espera de la llegada de otras 13 toneladas más”. Actualmente solo se produce Atamel Forte a 26,67% de su capacidad con 40 mil unidades diarias de 150 mil.
Por falta de insumos se ha dejado de fabricar en el área no penicilínica el multivitaminico Centrum; el anticonvulsivante Epamin; los antihipertensivos Amlodipina, Norvacs y Aldactone; el antiflamatorio Feldene; el desparasitante Quantrel y Sintisone, que es empleado para tratamientos respiratorios en niños. Mientras que en el departamento penicilínico está paralizada la elaboración de los antibióticos Zitromax, Unasyn, Diflucan y Combantrin.
Los almacenes de medicamentos importados siguen vacíos. Desde principios de 2015 no llega desde las compañías de la firma ubicadas en el exterior nada para el tratamiento de cáncer, colitis ulcerosa, insuficiencia cardiaca, colesterol y triglicéridos, alteraciones del tracto intestinal, epilepsia, convulsiones y pastillas anticonceptivas.
Se perdieron 350 puestos de trabajo en 2015, correspondientes a la fuerza de venta de visitadores médicos, y 65 de nómina diaria. Alberto Pérez, secretario de Organización del sindicato, alertó que desde la gerencia se ha manifestado que se producirá a baja capacidad solo hasta abril. Se desconoce el futuro de la firma en Venezuela a partir de ese momento, “ellos no comprarían más materia prima. No se fabricarían más medicamentos”.