EFE
El
Gobierno británico obtuvo este miércoles un amplio respaldo en la Cámara de los
Comunes para sumarse a los bombardeos internacionales contra el Estado Islámico
(EI) en Siria y planea ordenar los
primeros ataques en las próximas horas.
Tras un encendido debate parlamentario, los diputados aprobaron por 397 votos a favor y 223 en contra la
intervención militar propuesta por el primer ministro, el conservador David
Cameron, que contó con el apoyo de cerca de 70 diputados laboristas.
El líder del primer partido de la oposición, Jeremy Corbyn, contrario a los
ataques, concedió libertad de voto a sus parlamentarios ante la división
interna en la formación y la posibilidad de que algunos miembros de su equipo
dimitieran en caso de verse obligados a apoyar la línea marcada por la
dirección.
En una sesión que duró cerca de 10 horas, Cameron
pidió el apoyo de la cámara para que
la Real Fuerza Aérea británica (RAF) actúe contra los «violadores de
mujeres, asesinos de musulmanes y monstruos medievales» del Estado
Islámico en Siria.
El primer ministro defendió la necesidad de una intervención por motivos de
«seguridad nacional» y planteó la votación de esta noche como una
elección entre atacar a los yihadistas en Siria o bien «sentarse a esperar
a que ocurra un atentado en las calles del Reino Unido».