Dayrí Blanco

La actividad en el terminal Big Low Center se intensificó con la llegada del 2016. El retorno de los 978 mil 298 temporadistas que salieron desde el 1 de diciembre comenzó la madrugada del 2 enero, y coincido con el viaje de cientos de personas hacia destinos costeros. 

El déficit de unidades se hizo evidente con las largas colas en los andenes. La mayoría de los pasajeros esperaba el sábado para abordar un vehículo hacia Puerto Cabello, Tucacas, Chichiriviche, Aragua y Vargas. 

Natalie Arzola y su familia habían coordinado con antelación un viaje a las playas de Choroni. Con hospedaje a reservado cancelado estaban en el terminal para concretar el disfrute de los últimos días del receso de estas fechas. Pese a la espera se les vio contentos con maletas en mano y atuendo fresco. Mientras que Eugenia Cardozo y sus hijos no podían ocultar el cansancio a regresar de casa de los abuelos en San Cristóbal. 

Más pasajeros 

Hasta la fecha, informó el jefe de operaciones del Big Low, Arcángel Delgado, se han utilizado 35 mil 448 vehículos para cubrir la de banda y se han habilitado 263 como consecuencia de la falta de unidades por la escasez de repuestos. 

El número de pasajeros se incremento respecto a la misma temporada del año anterior. Del 1 de diciembre de 2014 al 1 de enero de 2015 salieron por el terminal terrestre 948 mil 389 personas. En esta oportunidad se registró un aumento de 3,15% al contabilizar 978 mil 298 temporadistas. 

Se espera que hasta la madrugada del lunes 4 hayan regresado entre 400 mil y 500 mil pasajeros.   

Aeropuerto sin retorno 

En el Aeropuerto Internacional Arturo Michelena el movimiento de temporadistas es escaso. La mañana del sábado solo dos grupos familiares esperaban para abordar el vuelo hacia Ecuador, que saldría a las 3:00 p.m. Representantes de líneas aéreas que funcionan en el lugar detallaron que la afluencia se presenta solo para salir hacia destinos como Aruba, donde los puestos eran agotados hasta marzo. El retorno aun no ha comenzado. 

En el terminal nacional el panorama es similar. La sala de espera se mantiene llena de personas con pasajes adquiridos hace más de mes y medio para Polamar, hacia donde ya no hay disponibilidad antes del 17 de enero.




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