Justo los domingos, cuando las vías están despejadas, sucede lo contrario en la calle López Aveledo de Maracay. El Santuario de la Madre María de San José no cuenta con estacionamiento y quienes asisten a misa en el sagrado lugar, deben estacionar sus vehículos en plena acera, sobre las rejillas cuyo fondo alberga transformadores subterráneos de la Corporación Eléctrica Nacional (Corpoelec).
El Santuario es un complejo religioso católico que comprende el templo para celebrar la eucaristía, un museo en el que se expone la vida y obra de la Beata María de San José y el espacio de agradecimientos donde se colocan las placas y demás pagos de promesas.
La falta de estacionamiento afecta el paso peatonal pues quienes asisten a pie al Santuario deben caminar por la calle para llegar a la avenida Bolívar o por la calle Santos Michelena. “El peligro es que las rejillas puedan ceder con el peso de los vehículos y suceda una desgracia con el alto voltaje que hay al fondo”, manifestó Fernando Sánchez en los alrededores del Santuario. (MAA)