Dayrí Blanco | @DayriBlanco07

Los reportes no paran de llegar. A toda hora. Son más de 30 al día los que deben ser atendidos solo en Carabobo. Los trabajadores de Corpoelec observan la lista de los lugares a los que deben ir con detenimiento, se planifican y simplemente se sientan a esperar por horas. No hay manera de cumplir con todas las fallas eléctricas que se presentan con un déficit de 95,31% de las unidades de movilización y atención de averías que se requieren entre las ocho estaciones de servicio de la estatal que funcionan en la región.

Carlos Arvelo, Guacara, Naguanagua, Libertador, Valencia, San Diego o cualquiera de los 14 municipios del estado. No importa donde sea la interrupción no programada. Llegar y hacer la restitución no solo depende de la denuncia ni la disposición de los operadores, “a veces hay que ir a Güigüe, pero hay que esperar que llegue la camioneta que está en Tocuyito”. Por eso es imposible determinar el tiempo de respuesta que Pablo Soto, secretario de organización del sindicato de la empresa eléctrica en Carabobo, prefiere definir como indefinido.

Se requieren en total 64 vehículos para atender las labores en todos los centros de servicios de la entidad. Se trata de una necesidad de dos unidades para cada departamento de mantenimiento, operaciones, comercialización y alumbrado público en cada uno de las ocho sedes de transmisión instaladas en la región . Pero la realidad es totalmente distinta. Se cuenta solo con tres para atender las exigencias que se presentan en las comunidades carabobeñas.

Hace más de un año el sindicato denunció la existencia  en la subestación de Castillito de un cementerio de unidades chatarra “y eso sigue igual. Lo único que ha cambiado es que ha empeorado la situación”.

Son los trabajadores quienes hacen el mayor esfuerzo por prestar el servicio al costear con recursos propios las preparaciones de los vehículos mientras que el departamento de bienes y servicio está desentendido de esa realidad y no cumple con la dotación de elementos mínimos. También sucede con los uniformes, herramientas e incluso agua potable en las oficinas.

Siguen las protestas

Los trabajadores de Corpoelec aún no cuentan con contratación colectiva. Se rigen por la que tiene seis años vencida mientras sigue en discusión la nueva desde hace 24 meses. Ellos exigen la concreción de inmediato de la convención que les actualice la escala salarial y los beneficios laborales.

Durante la mañana del lunes protestaron en las diferentes sedes de la estatal como la gerencia de transmisión central, en una acción nacional en contra de la no admisión del pliego conflictivo que pasaba el proceso de conciliatorio a una huelga indefinida. Ernesto González, secretario de reclamos del sindicato, adelantó que en los próximos días anunciarán una gran movilización en Caracas y otras medidas más radicales.

Denunció que los jefes de todas la áreas se han dedicado a amedrentar a los trabajadores y a programarles labores adicionales para mermar la capacidad de protesta.




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