Jenny Sánchez Petit
En la vía Aguirre Canoabo, a un lado de la carretera, en el sector La Pica, se encuentra Flor Tortolero, una mujer que a punta de esfuerzo ha ido construyendo un parque de piedras.
El espacio que ha tomado para sí. Compartirlo con lo que por allí pasan se ha ido transformando poco a poco a poco. Tortolero inició la construcción de los objetos que allí hay hace al rededor de unos cinco año. El sitio es, a su manera un espacio para honrar a quienes hicieron sus construcciones con este material.
El sitio es una de las actuales atracciones con las que cuentan los Valles Altos. Flor es una persona dedicada a preservar el medioambiente, a compartir los conocimientos que ha adquirido a lo largo de sus años y que tienen que ver con saber para que se usan las hierbas, por eso, al otro lado de la carretera creó un jardín. Las plantas están allí para que quien las necesite pueda utilizarlas.
Como defensora de la naturaleza, Tortolero utiliza objetos en desuso para hacer objetos en los que le indique a los otros seres humanos la necesidad de cuidar lo que nos rodea.