AFP
Uruguay sufrió un duro golpe, un fracaso impensado, al
quedar eliminado en las primeras de cambio de la Copa América Centenario luego
de solo dos partidos jugados, y perdidos, en el Grupo C del torneo.
"Es un llamado de atención antes de las
eliminatorias" sudamericanas para Rusia-2018, advirtió el entrenador
celeste, Oscar Tabárez.
El premundial regional se reanudará en
setiembre y hasta el momento, disputadas seis de sus dieciocho fechas, Uruguay
macha líder con trece puntos.
La celeste jugará en la próxima doble fecha
frente a Argentina de visita y contra Paraguay de local y necesita sumar al
menos tres puntos para mantenerse entre los puestos de vanguardia.
Pero el pobre nivel futbolístico mostrado
por el equipo charrúa en el torneo que se celebra en Estados Unidos ha dejado
más dudas que certezas en Uruguay.
"Nunca encontramos el juego que
queríamos y la ubicación que teníamos que tener en un partido que lo teníamos
que ganar sí o sí. No creamos grandes chances", dijo Tabárez, que no tuvo
empacho en reconocer que a Uruguay "le faltó juego."
Y el 'maestro', el encargado de encontrarle
la solución a la preocupante falta "de juego" evidenciada por Uruguay,
dio en la tecla.
"No jugamos como tiene que jugar un
equipo que debe tener el resultado", describió Tabárez.
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Suárez desesperado -
Con su estrella, Luis Suárez, lesionada y
desesperada por ingresar al campo de juego del estadio Lincoln Financial Field
de Filadelfia (este) al ver que se consumaba la derrota ante Venezuela y con
ello la eliminación, Uruguay fue incapaz de cambiar el rumbo y debió hacer las
valijas mucho antes de lo esperado.
Lo cierto es que el 'pistolero', que está
recuperándose de una lesión muscular sufrida el mes pasado en la Copa del Rey
con el Barcelona, no estaba habilitado para jugar ante Venezuela pues no había sido
anotado en la lista de jugadores dada por la selección antes del partido.
Por eso no se entendió su reacción cuando
vio que se consumaba la tercera variante y él quedaba relegado. Suárez mostró
su enojo y golpeó la banca de suplentes por quedar fuera del partido, pero
Tabárez no se dio por aludido.
Sin dejar de reconocer las ganas y la lucha
en busca de revertir los resultados adversos, lo cierto es que Uruguay solo
mostró destello de buen juego durante media hora del segundo tiempo contra
México, en el debut, cuando logró con diez hombres empatar el marcador, pero
luego terminó perdiendo 3-1 por dos goles sufridos en los minutos finales del
partido.
Ante Venezuela, la celeste fue un equipo
desesperado que apeló al pelotazo al área rival casi como único argumento para
dar vuelta la pisada y, de no mediar errores en la definición de los hombres de
la vinotinto, pudo haberse llevado una goleada en sus maletas.
En el debe quedó el rendimiento de varios
jugadores, empezando por Nicolas Lodeiro y Gastón Ramírez, los encargados de
alimentar a un solitario Edinson Cavani en ofensiva, ya que sus acompañantes
Diego Rolan (ante México) y Chrsitian Stuani (contra Venezuela) fueron
intrascendentes.
Tanto Lodeiro com Ramírez volvieron a
desperdiciar la oportunidad dada por el 'maestro' y sus presencias en la
selección uruguaya ya no se justifica. El problema para el DT es que no se
vislumbra una alternativa a ellos en el fútbol uruguayo.
Pero ellos dos no fueron los únicos que no
rindieron como se esperaba.
También quedó el deuda el lateral Alvaro
Pereira, que tras su discreto partido ante México, fue relegado a la banca de
suplentes contra Venezuela, y el propio Cavani, que si bien fue un derroche de
energías no estuvo fino a la hora de la definición, su fuerte, y marró varias
ocasiones claras.
Cavani venía de convertir sendos goles
contra Brasil y Perú en los partidos por eliminatorias jugados en marzo pasado
pero nuevamente se va en blanco en su tercera Copa América, tampoco pudo marcar
goles en Argentina-2011 y chile-2015.
"Este grupo está preparado para seguir.
Es uno de los momentos de carrera donde me llené más de tristeza y decepción
conmigo", aseguró Cavani. "Va a costar digerir esto".
La última vez que Uruguay quedó eliminado en
primera fase en una Copa América se dio en Bolivia en 1997. Poco después
también quedó sin posibilidades de clasificar al Mundial de Francia-1998.
¿Volverá a tropezar la celeste con la misma
piedra? En setiembre, cuando se reaunude el clasificatorio sudamericano para
Rusia-2018, comenzará a develarse la incógnita.