EFE
El vicecanciller alemán y titular de Economía, el líder
socialdemócrata Sigmar Gabriel, instó este domingo a mantener el diálogo con
Turquía, a pesar de las críticas hacia el Gobierno de Ankara.
"En la situación en la que estamos ahora, tenemos que buscar cualquier vía
de diálogo con Turquía", dijo Gabriel en una entrevista a la cadena de
televisión pública ARD y agregó que, al igual que ocurre con Rusia, no tiene
sentido hacer ver que no hay necesidad de entenderse "con este difícil
vecino".
En este sentido, subrayó que no hay que abandonar las negociaciones con Turquía
de adhesión a la Unión Europea (UE) aunque descartó que ese país pueda llegar a
ser miembro de pleno derecho de aquí a diez o veinte años.
Señaló que eso no ocurriría aunque cumpliera con todos los requisitos, ya que
la UE no se encuentra en estos momentos en condiciones de aceptar ni siquiera a
un pequeño Estado.
Aun así, se mostró convencido de que el bloque comunitario debe seguir
trabajando para que Turquía logre cumplir con los estándares europeos.
Pero si Ankara decide reintroducir la pena de muerte, lo que supondría atentar
contra un elemento central de la Carta de los Derechos Fundamentales de la UE,
recordó, ya no tiene sentido seguir negociando una posible adhesión, advirtió.
En referencia al acuerdo entre la Unión y Turquía que ha contribuido a que se
reduzca el flujo de refugiados a territorio comunitario, Gabriel insistió en
que no hay que dejarse chantajear por Ankara.
En este sentido subrayó que las negociaciones sobre la exención de visados para
ciudadanos turcos y el acuerdo UE-Ankara no tiene nada que ver una cosa con la
otra.
Si el Gobierno turco no cumple con su parte del pacto, Europa tendrá nuevamente
ante sí la tarea de reforzar las fronteras exteriores, de evitar que el
Mediterráneo se convierta una y otra vez en un cementerio y de crear mejores
opciones de ingreso dentro de Europa, afirmó.
"Es difícil, pero aunque sea difícil, no nos podemos dejar
chantajear", insistió.
Por otra parte, Gabriel no escatimó en críticas hacia sus socios conservadores
de la gran coalición de Gobierno, liderada por la canciller Angela Merkel, y
señaló que decir únicamente que se logrará hacer frente a la crisis de los
refugiados "no es suficiente, hay que actuar".
Cuando Alemania acogió a los refugiados por razones humanitarias como en la
gran oleada de otoño pasado, el país hizo lo correcto, pero esa solidaridad
conllevó dos problemas, el primero de ellos, detalló, que sólo unos pocos
países de la UE se mostraron dispuestos a recibir a estas personas.
El segundo error, agregó, fue que la Unión Cristianodemócrata (CDU) de Merkel y
su aliada bávara, la Unión Socialcristiana (CSU), a duras penas estuvieron
dispuestas a crear las condiciones para la integración de los refugiados y para
garantizar la seguridad.
Respecto a la carrera hacia la Cancillería de cara a las elecciones generales
de otoño de 2017, Gabriel indicó que no hay prisa y precisó que el Partido
Socialdemócrata (SPD) acordó nombrar "el o los nombres" de posibles
candidatos a principios del año próximo y tomar una decisión en un congreso de
la formación a finales de mayo.
Esa fecha alcanza, aseguró, porque el partido quiere hablar primero de lo que
es importante para el país, lo que es bueno para las personas en Alemania y
después sobre posibles candidatos.
En este sentido, se mostró convencido de que, si hubiera más de un aspirante, eso
sería bueno para el SPD.