Marielis Arteaga

Los más pequeñitos de la casa también pueden disfrutar de una práctica ganada a la salud y el bienestar integral. Sienten que juegan, comparten, se ejercitan y se retan ¡todo junto!

La práctica del yoga ha significado para muchas
personas, un vehículo para trabajar en el desarrollo físico y espiritual. Es
una actividad que serena, que reconecta con la espiritualidad, cultiva la
paciencia y al mismo tiempo, reta al cuerpo progresivamente, por eso, es pilar
para muchos adultos.

Eso bien lo sabe, Nair Castillo, comunicadora social
y locutora, conocida ampliamente en los medios de comunicación de Valencia.

Esta periodista egresada de la Universidad Católica
Andrés Bello y que prosiguió estudios de postgrado en la Universidad
Complutense de Madrid, hace tiempo inició una búsqueda personal a la par de su
pasión por los medios, que la llevó a la práctica de esta disciplina nacida en
el oriente del mundo.

Hace más de un año, Nair, un ser humano empeñado en
todo lo que hace decidió afianzar su práctica personal de Ashtanga Vinyasa Yoga,
por los beneficios que le ha proporcionado “me ha cambiado la vida para bien”,
asegura sin titubeos.

Justamente cuando se encontraba más enfocada en
practicar y avanzar llegó el mes de febrero de 2014.

El país quedó parcialmente paralizado y ella decidió
que practicaría yoga, todas las tardes con una amiga, en su mismo conjunto
residencial para calmarse y concentrarse en lo positivo. Lo mejor era no salir de
casa pero eso no sería impedimento para su propósito así que convirtió las áreas
verdes en su centro provisional.

Un grupo de niñas que solían jugar todas las tardes
en la misma área, al verla mientras hacía las posiciones tan particulares, la
abordaron y le preguntaron ¿Qué es eso que haces? Ella respondió: Yoga. Pero
las niñas, con la curiosidad tan característica de la edad no se quedarían
conformes con ese breve diálogo, ¿Y eso lo podemos hacer nosotras también?,
agregaron sin vacilar.

Esas inocentes preguntas fueron la chispa para que
Nair – que nunca lo había imaginado- se planteara brindar a los niños, los
beneficios inmensurables del yoga.

Comenzó a impartir las clases informales y acordes a
la edad, al grupo de sus vecinitas pero tomó la resolución de buscar formación
en esa área porque asegura ¡siempre me han encantado los niños, se abrió ese
espacio y ha sido un cambio hermoso en mi vida!

Ella continuó fortaleciéndose como alumna de yoga
gracias a la orientación de sus maestras, Claudia Borges y Vanessa Barreto;
asistió a diferentes cursos y talleres con grandes maestros domo Bernardino
“Bala” Machado, toda una autoridad en la materia y profundizó en Acroyoga pero
en noviembre del 2014 logró certificarse internacionalmente con Rainbow Kids
Yoga como instructora de yoga para niños. ¡Ahora también es maestra!

 

Para
niños ¡claro que sí!

Desde el año pasado, se atrevió a comenzar a dar
clases de yoga para niños de manera más formal y desde entonces, los niños han
sido sus maestros diariamente, “en el arte de dar sin esperar”.

Hoy se encuentra en el centro, Espíritu Libre Yoga
Shala, en Valencia, creado por Vayu Hernández –maestra de Reiki- que está
apegado fielmente al método y filosofía de Sri K Pattabhi Jois: Ashtanga
Vinyasa Yoga.

En el centro, Nair orienta a los pequeños en este
mágico universo de manera agradable, divertida, casi a manera de juego pero con
unos resultados visibles y maravillosos.

La instructora asegura que “el yoga para niños es
una forma divertida de desarrollar habilidades en un entorno amistoso, amable,
de respeto, fuera de la presión y competencia constante que existe en los
deportes y las escuelas y que en ocasiones los vuelven autocríticos y hacen que
pierdan la confianza en sí mismos. De ahí que el yoga sea la medicina idónea
para alimentar la fuerza interior y la auto-aceptación del niño”.

En las clases hay un equilibrio entre la
espontaneidad y la estructura; los niños aprenden a escucharse, expresarse de
forma creativa a través de posturas de yoga, juegos, canciones, acrobacias
sencillas combinadas con posturas de yoga, historias, control de la respiración
(Pranayama), meditaciones y mandalas que dibujan sobre papel o piedras. ¡hasta
suenan el cuenco tibetano!

Las clases son impartidas a niños desde los cuatro
años ya que a partir de esa edad, los pequeñines van solos al baño y hasta los
12 años.

Las sesiones tienen una duración de una hora (de
4:00 p.m. a 5:00 p.m.) en grupos mixtos, así que niñas y niños de diferentes
edades, aprenden a interactuar de una manera muy saludable. “Eso sí, cada niño
avanza de manera individual, no se les presiona para logren algo en un
determinado momento. Cada uno lo hará a su ritmo propio. Hay niños que tienen
mucha flexibilidad y desde la primer clases realizan posturas realmente
avanzadas que incluso a un adulto le puede costar pero no tiene porque ser así
en todos”.

Muchos niños llegan a las clases de yoga un poco
para paliar las tensiones de los estudios e incluso, de la situación del país
pero pronto se ven que superan los estados de estrés. ¿Cómo se evidencia?
Mejora el comportamiento en clases, las calificaciones, e incluso los niños con
algún tipo de limitación como los autistas, mejoran su interacción y su
manifestación de afecto.  

Es recomendable que traigan ropa cómoda y no hayan
ingerido ningún

alimento o bebida una hora antes de la práctica.

A partir de agosto, esta comunicadora inmersa
profundamente en el mundo del yoga ahora fusionará sus pasiones y tendrá micros
radiales llamados Radio Shala –que se transmitirán tres veces al día- para
informar sobre bienestar, salud, yoga, meditación porque si bien ama su carrera
“a través del yoga he descubierto mi verdadera vocación”, así que un futuro no
muy lejano, no solo los niños podrán ser instruidos por Nair, también los
adultos que lo quieran, emprenderán el camino junto a ella.   

 

Beneficios:

Mejora la fuerza y flexibilidad

Enseña a encontrar la paz interior

Aumenta la autoconfianza y construye una autoimagen
positiva

Aumenta la fuerza emocional

Alimenta la creatividad

Enseña el amor hacia uno mismo

Aumenta la conciencia corporal y la capacidad
sensorial

Ayuda a fortalecer la concentración

Mejora la coordinación y el equilibrio

Expande la conciencia de la naturaleza y el entorno

Desarrolla la autodisciplina y el autocontrol

Ayuda a los niños a construir su fuerza interior

Enseña a relajarse y reducir el estrés

Twitter:

@naircastillo

Instagram:

@naircastillo

Instagram:

@espiritulibreyogashala




Estimado lector: El Diario El Carabobeño es defensor de los valores democráticos y de la comunicación libre y plural, por lo que los invitamos a emitir sus comentarios con respeto. No está permitida la publicación de mensajes violentos, ofensivos, difamatorios o que infrinjan lo estipulado en el artículo 27 de la Ley de Responsabilidad en Radio, TV y Medios Electrónicos. Nos reservamos el derecho a eliminar los mensajes que incumplan esta normativa y serán suprimidos del portal los contenidos que violen la Constitución y las leyes.