La ONG Médicos Unidos de Venezuela criticó este miércoles la política de flexibilización de las medidas de protección contra la COVID-19 adoptadas a propósito de la celebración del carnaval en todas las regiones del país.
«Días festivos de carnaval muestran una vez más el grado de inconsciencia del poder político y de una gran parte de la sociedad civil. Fiestas, agasajos, compartir, encuentros sin o con mínima protección», apuntó la ONG en un mensaje publicado en su cuenta en Twitter.
Médicos Unidos de Venezuela insistió en que son necesarias las medidas de bioseguridad, incluso durante las celebraciones, pues a la «COVID-19 no le importa de que te disfraces, te encuentra y te ataca».
Durante el lunes y el martes, cientos de caraqueños tomaron el emblemático paseo Los Próceres, en el suroeste de Caracas, usando disfraces del Hombre Araña y del popular «Superbigote», un personaje de caricatura ideado por el Gobierno venezolano, para celebrar el carnaval y disfrutar de las actividades organizadas por la Alcaldía local.
Amontonados en gradas, frente a tarimas y ante plataformas de juegos infantiles, los residentes de la capital venezolana olvidaron las restricciones por la pandemia y se dedicaron a disfrutar del espectáculo de carrozas y músicos que se desplegó en todo el paseo.
Se trata del segundo carnaval que Venezuela atraviesa en medio de la pandemia por COVID-19 y, a diferencia del año anterior, las actividades al aire libre y sin restricciones marcaron la festividad que, esta vez, incluyó desfiles y conciertos en Caracas y otras ciudades del país.
Para la celebración, el Gobierno tenía previsto el despliegue de 142 mil funcionarios de seguridad para resguardar a los ciudadanos que viajaron, tal como informó el pasado jueves el ministro de Interior venezolano, Remigio Ceballos.
Ceballos afirmó entonces que estimaban, de acuerdo a un «cálculo aproximado», la movilización de 4 millones 800 mil venezolanos desde el viernes pasado hasta este martes, último día del carnaval, en el país caribeño.
