Los accionistas del grupo alemán de aeronáutica Lufthansa aprobaron este jueves con 98% de votos el plan de rescate de 9 mil millones de euros (más de 10 mil 100 millones de dólares), que implica el retorno del Estado al capital de la empresa.
La operación de rescate tenía despejado su camino, después de que el principal accionista de la empresa anunciara que votaría a favor del plan.
La votación en la asamblea general levantó el último obstáculo para la aplicación del plan. «Haremos que esto funcione», aseguró el presidente de Lufthansa, Karl-Ludwig Kley.
«Votaré a favor del proyecto de acuerdo» que prevé en particular el retorno del Estado al capital del grupo alemán, había afirmado al diario Frankfurter Allgemeine Zeitung (FAZ) el accionista Heinz Hermann Thiele, de 79 años.
Hasta ahora Thiele, quien posee 15,5% del capital de la compañía, había amenazado con bloquear el plan de rescate.
Temor a la participación estatal
La probable llegada del Estado alemán a los accionistas de Lufthansa causó inicialmente las críticas de Thiele, pues temía que el gobierno se opusiera a los recortes de efectivos, necesarios según él para enderezar la compañía y hacer subir el precio de la acción en bolsa.
Ahora parece convencido de que la compañía hará lo mismo con la presencia del Estado en su capital.
«Es de interés de todos los empleados de Lufthansa que la dirección pueda llevar a cabo rápidamente negociaciones con los sindicatos sobre la reestructuración necesaria», dijo Thiele el miércoles al FAZ.
Posibilidad de quiebra
Lufthansa había advertido que, sin ayuda, «la empresa se encontraría en cese de pagos días después de la asamblea general» y tendría que solicitar ponerse bajo protección de la legislación alemana de quiebras.
Pero aún beneficiándose de la ayuda pública, los próximos años serán difíciles para Lufthansa.
La reactivación de las operaciones será muy gradual. En septiembre, el grupo pronostica una oferta que todavía estará 60% por debajo de lo normal.
Para adaptarse a esta disminución prolongada, Lufthansa ya planea recortar el equivalente de 22 mil empleos a tiempo completo, el 16% de la fuerza laboral global, la mitad de los cuales se encuentran en Alemania.
El miércoles por la noche, la empresa y el sindicato que representa a la tripulación de cabina habían superado otro obstáculo al acordar un plan que debe permitir una reducción de costos del orden de los 500 millones de euros (unos 560 millones de dólares).
«Queremos evitar despidos», dijo el director de recursos humanos, Michael Niggemann, citado en el comunicado.
Lufthansa advirtió que, incluso con esta ayuda, la caída de la demanda en el transporte aéreo, cuyo impacto se vería durante varios años, podría obligarlo a recortar miles de empleos.
Bruselas aprobó el plan
La Comisión Europea dio luz verde este jueves al proyecto de Alemania de recapitalizar a Lufthansa, primer grupo de transporte aéreo del continente, con unos 6 mil millones de euros (6.747 millones de dólares), para que pueda hacer frente a la crisis generada por el coronavirus.
Esta ayuda «viene acompañada de condiciones, entre ellas asegurar que se remunere suficientemente al Estado y otras medidas para limitar las distorsiones a la competencia», dijo la comisaria europea del ramo, Margrethe Vestager, en un comunicado.
«Lufthansa se ha comprometido a poner a disposición franjas horarias (…) en sus aeropuertos centrales de Fráncfort y Múnich», agregó la vicepresidenta de la Comisión, para quien esto dará a sus rivales «la oportunidad de entrar en esos mercados» y una mayor oferta para los consumidores.
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