Los comercios en el mercado municipal La Candelaria, Valencia, se vieron afectados por una falla en el servicio eléctrico originada la madrugada de este lunes que dejó sin luz a la mitad de la ciudad.
Las charcuterías y carnicerías fueron las más afectadas y su dueños ya no soportan la situación. “Estamos preocupados porque tenemos más de cinco horas sin luz y la mercancía está perdiendo el frío”, indicó Reinaldo Maldonado, un carnicero que trabaja en el periférico desde hace 16 años.
Para comerciantes de otros rubros el problema es la imposibilidad de realizar transacciones. “Con la señal muerta no se puede hacer pagomovil. Entonces si no tienes planta o punto inalámbrico no vendes”.
Sobrevivir a la crisis
Roxana Vilorio se siente agotada. No es primera vez que el mercado se queda sin electricidad y las pocas ventas que realiza la tienen intranquila. A la preocupación se suma la presión de los proveedores que merodean los pasillos del recinto exigiendo sus pagos. “Lo que no queremos es descapitalizarnos. Tenemos que salir de la mercancía para poder pagarle a los corredores que vinieron a cobrar pero los cortes de luz nos tienen azotados”.
La deficiencia del sistema eléctrico en la entidad no es lo único que perjudica a los comerciantes que todavía intentan recuperarse de siete meses de cierre al inicio de la pandemia. “Nosotros nunca debimos cerrar porque vendemos alimentos, eso nos afectó mucho, pero ahora también es el tema de la gasolina. Las personas no tienen cómo movilizarse o simplemente prefieren comprar cerca de sus casas antes de echarse el recorrido hasta acá”.
La escasez de efectivo y el recurrente alza del dólar paralelo también ha perjudicado la economía de los vendedores. “Todos los precios se calculan en divisas y eso ha generado problemas a los clientes para cancelar. Si no tenemos sencillo para el vuelto, perdemos el cliente”, comentó Jesús Suárez.