El catarí Nasser Al-Attiyah (Toyota) explicó que fue un difícil Rally Dakar a pesar de la ventaja con la que llegó a la meta (más de una hora sobre el francés Sébastien Loeb) y consideró increíble poder ganarlo por segundo año consecutivo y llevárselo por quinta vez, con lo que ha superado a su ídolo Ari Vatanen.
“Acabamos de terminar y estoy contentísimo. Ha sido un Dakar difícil para todo el mundo, pero nosotros lo manejamos y es increíble haber podido revalidar el título», indicó tras la meta.
Se mostró feliz por haber ganado por quinta vez y superar así los cuatro que conquistó Vatanen. Ahora, en coches, solo tiene por delante al francés Stéphane Peterhansel, que cuenta con ocho.
«Respeto al máximo a Ari, siempre ha sido mi ídolo. Yo siempre quiero ganar más y ahora me toca defender el título de campeón del mundo (de raids)», explicó.
Al-Attiyah, que se benefició de los problemas de sus rivales (Loeb, Peterhansel y el español Carlos Sainz, principalmente), dejó el Dakar resuelto en la primera semana y se centró en conservar la ventaja en la segunda, en el terreno que mejor se le da, las dunas.
«No hemos tenido que atacar a lo loco. Hemos conseguido terminar la segunda semana y hemos ganado el Dakar al final, que es lo importante”, precisó.