Un 12 de Junio de 1929, hace 88 años, nació en Alemania Ana Frank, la niña que conmovió al mundo con su relato sobre la persecución a los judíos durante la Segunda Guerra Mundial.
Tenía cuatro años cuando se mudó con su familia a Amsterdam debido a las amenazas del régimen de Hitler contra los judíos. Una vez allí tampoco se sintieron seguros. El libre tránsito y desarrollo de una vida normal estaban vetados para ellos. Ante esta situación, que se agravaba con el paso de los años, el padre de Ana, Otto Frank, habilitó un escondite en los pisos superiores de su casa.
El 6 de julio de 1942 la familia Frank comenzó un encierro de dos años que era minuciosamente documentado en un diario por su pequeña hija. De día no podían hablar ni hacer ruidos. Ana y su hermana Margot, tres años mayor, estudiaban en casa para no atrasarse en el colegio.
El primero de agosto de 1944, dos años después del encierro, Ana escribió por última vez en su diario. Luego ella y su familia serían apresados y llevados a los campos de exterminio. En Auschwitz, la primera en morir sería su madre. Ana y Margot fueron enviadas al campo de Bergen-Belsen en marzo de 1945, donde ambas murieron enfermas de tifus, justo cuando faltaban dos meses para la derrota y capitulación del Tercer Reich. El padre de Ana fue liberado en Auschwitz por las tropas rusas.
A su regreso a Amsterdam Otto Frank, siguiendo el consejo de un amigo, decidió publicar, en 1947, el diario de su hija con el título de “La Casa Interior”. Fue el comienzo de un asombroso éxito editorial. El libro ha sido traducido a más de cincuenta idiomas.
