El número uno del mundo, el británico Andy Murray, salvó siete puntos de partido ante el alemán Philipp Kohlschreiber (6-7(4), 7-6(18) y 6-1) para sobrevivir en el torneo de Dubai y alcanzar los cuartos de final.
El talento sostuvo al primer favorito, finalista en este escenario en el 2012, a pesar de su irregularidad. Busca su primer título del año Murray, que estuvo contra las cuerdas ante un rival sólido que le llevó al límite.
Murray desperdició cada ocasión y se metió en un lío. Especialmente en el segundo set. Mejoró el británico tras ceder la primera manga en el «tie break» y se situó con 5-3 y el saque de su lado en el segundo.
Perdió el servicio y el choque se le enquistó. El desempate de este parcial fue épico. Los puntos de set para Murray se alternaron con los puntos de partido para Kohlschreiber, que solo tuvo dos de ellos con el servicio.
Fue en esta situación, al límite, donde Murray mostró su mejor nivel. Evitó la derrota en un desempate que duró más de media hora y que terminó de su lado por 20-18.
Kohlschreiber, sin embargo, acusó notablemente la pérdida de ese set y la gran ocasión para ganar, por segunda vez en su carrera en seis enfrentamientos, al número uno del mundo. Y en el tercero bajó los brazos.
Andy Murray, que esta temporada su mejor resultado fue la final de Doha, cerró el encuentro en casi tres horas. Jugará ante el vencedor del partido entre el ruso Evgeny Donskoy, verdugo de Roger Federer, y el francés Lucas Pouille, séptimo favorito.
