Dos brasileños investigados por pagar sobornos a senadores y otros funcionarios fueron arrestados este viernes en Estados Unidos, informó la Policía Federal de Brasil (PF), en el último capítulo del escándalo de corrupción en Petrobras.
Las autoridades indicaron que los sospechosos se llaman Jorge Luz y Bruno Luz y fueron detenidos por la policía de inmigración del país norteamericano, sin detallar la ciudad.
Según medios brasileños, la operación se llevó a cabo en Miami, donde ambos tienen una orden de arresto de Interpol, fueron vistos por última vez.
De acuerdo con la PF, ambos fueron detenidos por omitir información a las autoridades de migración estadounidenses. Y agregó que aún no hay previsión de una eventual extradición a Brasil.
Padre e hijo eran buscados por un caso que investiga el pago de unos 40 millones de dólares en sobornos a senadores del partido conservador PMDB, del presidente Michel Temer, y a otros funcionarios, como parte del monumental fraude que le costó más de 2.000 millones de dólares en pérdidas a Petrobras, con ramificaciones en una decena de países.
El procurador Diogo Castor de Mattos dijo el jueves que los receptores de las coimas eran mayormente senadores con mandatos vigentes, por lo que disponen de fueros privilegiados y solo pueden ser juzgados por la corte suprema.
La investigación reveló que los Luz habrían intermediado entre las empresas que firmaban contratos con Petrobras y los directivos de la petrolera que autorizaban las obras y luego distribuían los fondos entre los políticos.
Su actuación estuvo circunscrita al área internacional de Petrobras, identificada por Diogo como territorio del PMDB dentro del esquema montado por políticos para repartirse los negocios de la petrolera, financiar campañas y engrosar sus fortunas personales.
Según la llamada Operación Lava Jato (lavadero de autos), algunos de los principales partidos brasileños nombraban directores de su confianza en Petrobras, que se encargaban de desviar el dinero público.
El Partido del Movimiento Democrático Brasileño (PMDB) negó en una nota pública divulgada el jueves que los involucrados en la causa tuvieran relación con el partido o estuvieran autorizados a hablar en su nombre.