Quince puñaladas le propinaron a Carlos Eduardo Chapellín Marín, obrero, de 30 años, cuando salió a comprar pan y lo interceptaron para asaltarlo en el sector Buena Vista de Petare, el lunes a las 3:15 de la tarde.
Chapellín residía en el sector La Virgen del barrio Unión y trabajaba como barrendero en una cuadrilla de limpieza del Gobierno del Distrito Capital. Un familiar relató que varios hombres lo rodearon, lo acuchillaron y le quitaron el koala con dinero, documentos y celular.
El obrero vivía solo en una habitación alquilada y como acostumbraba a llamar a su madre todas las mañanas, el martes notaron su ausencia. Lo buscaron en cuerpos policiales y el miércoles lo encontraron en la morgue del hospital Domingo Luciani, en El Llanito, donde lo habían llevado unos funcionarios de Protección Civil.
Chapellín era el tercero de ocho hermanos y el único varón que quedaba con vida. Hace 16 años mataron a Luis Alfredo, hace 12 años a Oswaldo Eleazar y a Carlos Daniel lo asesinaron hace 7 años. Todos los crímenes ocurrieron en Petare. Sobreviven cuatro hembras que este viernes estaban en la morgue retirando el cuerpo de Carlos Eduardo.
Ellas prefirieron mantener sus nombras en reserva, pero piden más seguridad para que no haya más víctimas de la delincuencia.
DOS HERMANOS
A la morgue también llevaron los cuerpos de los hermanos Edward José (32) y Kelvin Valero Urbina (25), abatidos en un presunto enfrentamiento con funcionarios de la Policía Nacional Bolivariana.
Los hechos se registraron el martes 10 de octubre en horas de la tarde, en la calle La bombilla de Cotiza, parroquia San José, al norte de Caracas.
En la morgue trataban de identificar a Kelvin, porque el hombre nunca sacó la cédula de identidad.
