El sábado se dio una de las sanciones más solicitadas por el gobierno de Ucrania: sacar a determinados bancos rusos del sistema internacional Swift. Un golpe económico muy duro para la administración de Putin, pero que también podría tener consecuencias en Venezuela.
Y es que, aunque esta acción coordinada entre Estados Unidos y la Unión Europea, junto a Reino Unido y Canadá, tiene como objetivo principal evitar que Rusia use 630 mil millones de dólares en reservas de divisas internacionales, con efectos inmediatos en sus mercados financieros, para el gobierno de Nicolás Maduro puede ser muy complicado.
Esto es así porque el sistema de transacciones Swift es la base del sistema financiero global y lo usan 11 mil bancos en 200 países o territorios para poder hacer transferencias.
La incidencia en Venezuela es clara: “Si el dinero del gobierno está en bancos rusos no se va a poder transferir para hacer pagos. Se complica todo”, explicó el economista y diputado de la Asamblea Nacional electa en 2015, José Guerra, a través de su cuenta en Twitter @JoseAGuerra.
Acaban de sacar a bancos de Rusia del sistema #SWIFT. Este es un sistema global que permite hacer transacciones en divisas a nivel global. Qué significa para Venezuela? Si el dinero del gobierno está en bancos rusos no se van a poder transferir para hacer pagos. Se complica todo
— Jose Guerra (@JoseAGuerra) February 26, 2022
De manera más gráfica, dijo que, si Pdvsa tiene una cuenta en un banco de Rusia excluido del Swift y quiere hacer una transferencia al Banxico de México, al UBS de Suiza o a un banco de Turquía para pagar a un proveedor, no lo podrá hacer por esa vía.
Vamos con un ejemplo. Si Pdvsa tiene una cuenta en un banco de Rusia excluido del #SWIFT y quiere hacer una transferencia al Banxico de México, al UBS de Suiza o a un banco de Turquía para pagar a un proveedor, no lo podrá hacer por esa vía. https://t.co/VDuUIRKc5M
— Jose Guerra (@JoseAGuerra) February 26, 2022
Esta medida en contra de los bancos rusos, aunque no se informó cuáles están incluidos, forma parte del nuevo paquete de sanciones aprobado en respuesta a la operación militar especial lanzada la madrugada de este jueves por Vladímir Putin para la “desmilitarización y la desnazificación de Ucrania”.
Su objetivo es “aislar a estas instituciones de los flujos financieros internacionales”, declaró el Gobierno federal de Alemania.
