El Gobierno del estado australiano de Victoria, que acoge el Open de Australia de tenis el próximo enero, indicó este miércoles que las vacunas obligatorias contra la covid-19 para entrar en el país no son "un chantaje", en respuesta a las declaraciones del padre del número uno mundial, Novak Djokovic.
"No tiene nada que ver con chantaje sino con hacer que la comunidad de Victoria esté más protegida", afirmó a los medios el ministro de Deportes de Victoria Martin Pakula, después de que el padre del tenista, Srdjan Djokovic, pusiera en duda que su hijo vaya a participar en el Open de Australia por la obligatoriedad de la vacuna para entrar en el país, que consideró un "chantaje".
Djokovic, que no ha querido revelar si se ha vacunado contra la covid-19, quisiera jugar el torneo "con todo su corazón", según su progenitor, que recalcó a la televisión serbia Prva TV que "bajo estos chantajes y condiciones posiblemente no lo hará".
Para participar en el Abierto de Australia se exige a los tenistas un certificado de vacunación, según ha confirmado recientemente Craig Tiley, director del torneo.
Tiley precisó que las autoridades del estado de Victoria, donde se celebra la competición, anunciaron la obligatoriedad de la vacuna y así se le comunicó a los jugadores.
De ganar en el próximo Abierto de Australia, disputado en Melbourne entre el 17 y el 30 de enero, Djokovic podría superar con 21 títulos de Grand Slam al español Rafael Nadal y al suizo Roger Federer.