El exvicepresidente de EE.UU. Joe Biden ganó las primarias demócratas a la Casa Blanca frente al candidato de izquierdas Bernie Sanders en Texas, resultado con el que logra un pleno de estados sureños en este supermartes.
Con un 89 % escrutado, Biden tiene un 33,3 % de los votos frente al 29,3 % de Sanders, un margen relativamente pequeño comparado con las abrumadoras victorias del exvicepresidente en otros estados de la región.
Texas es el segundo estado más grande del país y este supermartes repartía 228 delegados, tan solo por detrás de los 415 de California, también llamada a votar en esta jornada.
Los otros trece estados convocados a las urnas este supermartes se repartieron ocho para Biden y cuatro para Sanders, mientras que el único sin ganador proyectado todavía es Maine, donde el exvicepresidente encabeza el escrutinio.
Biden ganó sin discusión en los estados conservadores del Sur (Virginia, Carolina del Norte, Tennessee, Oklahoma, Alabama y Arkansas), aunque también lo hizo en Massachusetts (Nueva Inglaterra) y en Minesota (Medio Oeste).
Sanders, por su parte, confirmó las previsiones que lo situaban como el gran favorito a ganar el premio gordo del supermartes, California, y también salió victorioso en Colorado, Utah y su estado: Vermont.
A la espera de conocerse el reparto de delegados, los resultados consolidan la pugna por el control del partido entre el aparato representado por Biden y la alternativa izquierdista con Sanders en cabeza.
Los otros tres demócratas que siguen en las primarias, la senadora Elizabeth Warren, el multimillonario exalcalde de Nueva York Michael Bloomberg y la congresista Tulsi Gabbard, obtuvieron resultados discretos.
En las próximas horas se conocerá la distribución exacta de los 1.357 delegados que se repartían este supermartes, un tercio del total de las primarias, aunque lo más probable es que Biden tome por primera vez la delantera de la contienda.
Su candidatura se vio propulsada por los acontecimientos de las últimas 48 horas, con el exalcalde Pete Buttigieg y la senadora Amy Klobuchar suspendiendo sus campañas en su favor, en lo que se ha interpretado como un golpe sobre la mesa del aparato del partido ante unas primarias divididas que beneficiaban a Sanders. EFE