Bolivia registró en 2019 un incremento de 10% de sus cultivos de hoja de coca respecto a a 2018, al pasar de 23 mil 100 a 25 mil 500 hectáreas, informó este miércoles en La Paz la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC).
«En 2019, el cultivo de coca en Bolivia se incrementó en 10% en comparación con los datos de 2018», señaló Thierry Rostan, representante de la UNODC en Bolivia, en una videoconferencia en la que también alertó sobre cultivos ilícitos en áreas protegidas.
La expansión de los cultivos de hoja de coca, materia prima de la cocaína, se registró principalmente en los Yungas, valles subandinos, del departamento de La Paz (oeste), y también en los valles del departamento de Cochabamba (centro), bastión político del expresidente Evo Morales (2006-2019), según el informe anual de la UNODC.
Bolivia se posiciona como el tercer productor de cocaína en el mundo, detrás de Colombia y Perú, según la UNODC.
Satelites detectan incremento
Según esta agencia de la ONU, que realiza un monitoreo del milenario cultivo, el incremento se detectó al combinar el uso de imágenes satelitales y de información recogida en trabajos de campo.
Asimismo, el organismo alertó que se detectó «la presencia de cultivos de coca en 6 de las 22 áreas protegidas a nivel nacional», donde está prohibida por ley toda cosecha de esa planta.
En Bolivia es legal el consumo de coca para mascado, infusión y rituales religiosos andinos.
Una ley aprobada en 2017 por Morales amplió los cultivos legales de coca de 12 mil hectáreas a 22 mil.
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