Se inicia otra etapa de lucha que no debe parar y que debe tener claros sus objetivos, aseveró el gobernador de Miranda, Henrique Capriles, quien ratificó el llamado a manifestar este miércoles 19 de abril desde los 26 puntos pautados en Caracas y los del resto del país hasta las sedes de la Defensoría del Pueblo en cada estado.
Durante su programa Pregunta Capriles, puntualizó este martes que las razones para manifestar son específicas: Elecciones libes y democráticas, apertura de un canal humanitario, libertad a los pesos políticos, no inhabilitaciones y respeto a la Asamblea Nacional (AN). La Constitución nos dice qué es lo debemos hacer. «Si se logra una, hay que seguir luchando por las otras».
queremos un cambio para Venezuela
El 19 de abril es una fecha patria, señaló. No permitiremos que el Partido Socialista Unido de Venezuela (Psuv) quiera apropiarse de ella. Mañana es la marcha de todos, somos quienes queremos un cambio para Venezuela. Nos han cerrado todos los caminos y manifestar pacíficamente es nuestra forma de responder.
El Gobierno, con la tortura y todos sus falsos positivos, busca que la gente se desmovilice este miércoles. Pero quien defiende la verdad, no tiene por qué sentir miedo, reiteró.
Instó a la Fuerza Armada Nacional (FAN) a cumplir con los deberes que establece la Constitución y a resguardar la vida y los derechos de los venezolanos durante las manifestaciones. «La Fuerza Armada no es Vladimir Padrino», sostuvo en referencia al ministro de la Defensa.
Detenciones
Según datos de Capriles, 538 personas fueron detenidas desde que iniciaron las manifestaciones en rechazo al golpe de Estado del Gobierno.
Hay 32 nuevos presos políticos
De ese total, 241 siguen bajo arresto, 32 fueron formalmente privadas de libertad por decisión judicial, 165 fueron liberados sin presentación, 64 liberados con medidas cautelares, 152 liberados previa presentación de fiador, 89 con audiencia de presentación pendiente y 36 con libertad plena. «Hay 32 nuevos presos políticos», sentenció.
Hizo referencia a que los seis sujetos detenidos por presuntamente querer allanar la Casa Amarilla, residencia oficial de la gobernación de Mirada, y portar armas blancas, les dieron libertad plena. Mientra que a los hermanos Sánchez, que no hicieron nada, les dictaron privativa de libertad. Lo único que hay en su contra es un vídeo grabado luego de ser sometidos a torturas.
