Tres presuntos delincuentes fueron capturados en flagrancia por oficiales de la Policía Municipal de Chacao, tras cometer un robo en la quinta número 2, ubicada en la quinta transversal de Los Palos Grandes.
El alcalde del municipio, Gustavo Duque, informó que gracias al sistema de comunicación que mantienen a través de los chats vecinales, recibieron la señal de alarma en el centro de operaciones policiales, logrando movilizar a tiempo a los funcionarios.
El miércoles en la tarde un vecino observó movimientos extraños en la residencia, avisó, y cuando llegaban las comisiones salía del inmueble un carro Toyota, corolla, color rojo, con dos tripulantes, quienes al observar a la policía aceleraron para huir, pero más adelante chocaron.
Los dos ocupantes fueron capturados y recuperados los artefactos electrodomésticos que habían robado. Otras comisiones ingresaron a la quinta y en el estacionamiento encontraron al tercer asaltante, que estaba escondido detrás de un carro, esperando el momento oportuno para salir.
Los aprehendidos fueron identificados como Abraham Isaac Bastardo Godoy, con registros por droga y porte ilícito de arma de fuego; Yenderson José Zerpa González (21) y Ermer José del Valle Bello Glott, de 22 años.
La información fue aportada en rueda de prensa por el alcalde de Chacao, Gustavo Duque, en compañía del comisario Luis Alberto Godoy, director de la Policía Municipal y del subdirector, Rusvel Vásquez.
Dos de los detenidos viven en el barrio Bucaral y el otro en el barrio Pajaritos, sectores populares enclavados en el mismo municipio, y por el modus operandi los investigan en otros robos cometidos en Chacao.
En esta oportunidad burlaron el sistema de seguridad de la quinta, al escalar por un área de la entrada que no tiene cerco eléctrico. Andaban a pie y suponen que acostumbran a merodear por las calles en busca de algún acceso fácil para meterse en cualquier vivienda.
Cuando entraron a la quinta sometieron al dueño, un señor de 68 años y a la señora del servicio doméstico. Los ataron con tirraje, exigían que les entregaran dólares y oro y que los llevaran hasta la caja fuerte. Al sexagenario le causaron heridas en la cabeza y el rostro, para obligarlo a entregar objetos de valor, pero no tenía dólares ni oro, porque en el último hurto de que fue víctima hace un año, los ladrones se llevaron todo.
