Tal como se había anunciado, este sábado se reanudó el pago de peajes en las distintas autopistas de Carabobo, luego de estar suspendido durante 10 años por decisión del fallecido expresidente Hugo Chávez.
A media mañana el gobernador Rafael Lacava, autor de la iniciativa, presidió un acto a un lado del peaje de Guacara, donde estuvo acompañado por varios miembros de su tren ejecutivo, así como por el jefe de la Zona Operativa de Defensa Integral, general Juan Carlos Du Boulay, entre otras personas.
El mandatario regional insistió en que el cobro del peaje se hace con la intención de poner las autopistas en buenas condiciones viales. Aseguró que el trabajo de limpieza comenzó hace tres semanas y ya se aprecian los resultados.
Lacava señaló además que ya giró instrucciones al secretario de Infraestructura, Jesús Meza, para que se proceda a demarcar y a iluminar las autopistas.
En lo adelante los vehículos livianos pagarán cinco mil bolívares, y se incluye en esta modalidad los carros de paseo, las camionetas, pick-up, rústicos, así como los microbuses de 16 a 32 pasajeros y autobuses con más de 32 pasajeros. Los vehículos de carga pesada pagarán entre 25.000 y 60.000 bolívares. Mientras que quedan exonerados del pago los vehículos oficiales de organismos del Estado.
Sin embargo el gobernador no descartó que estas tarifas pudieran incrementarse, pues considera que este es un servicio que se debe pagar al igual que otros.
Los usuarios tienen la posibilidad de pagar el peaje con dinero en efectivo o con tarjeta de debido. Lacava hizo el primer cobro de peaje al conductor de un camión 350, de nombre Héctor Fuenmayor, quien viajaba de Caracas a Caja Seca y tuvo que pagar 15 mil bolívares por el uso de la autopista.
Durante el acto el mandatario regional señaló que mensualmente se escogerá al mejor recaudador de los peajes o al mejor gruero, y se le pagará un bono especial como incentivo.
“Para mí este es un día histórico. Me siento contento de ser parte de este cambio”, subrayó.
Mientras estaba cobrando a los usuarios, el gobernador admitió que el sistema genera mucha cola y por lo tanto retraso en la circulación vial.
