Más vigente que nunca. Así está la imagen de la Virgen del Socorro, cuyas lágrimas que salen de sus ojos son su identificación con todo el pueblo de Venezuela que “sufre y llora por sus carencias y privaciones, que son muchas”.
Así lo expresó el cardenal Diego Padrón, durante su homilía en la eucaristía celebrada en honor de los 113 años de la coronación canónica de la patrona de Valencia.
Para él, no hay duda de que la imagen de Nuestra Señora del Socorro es un regalo, un mensaje perenne de valor y audacia que Dios envía al pueblo de Carabobo.
“Bajo la gracia de sus ojos todos somos sus hijos, por los diferentes caminos de la patria, y fuera de ella, vamos los venezolanos cargando la pesada cruz de nuestra situación política, social, moral y económica… Ya no solo falta el pan en la casa del pobre, sino que todos somos pobres porque falta el pan, el agua, la luz, el gas, la medicina y la esperanza”, dijo el cardenal y los aplausos se hicieron sentir en el Fórum de Valencia, ante la presencia de autoridades como la primera dama, Nancy de Lacava, y parte del tren ejecutivo municipal, a excepción del alcalde Julio Fuenmayor, quien se retiró de la misa a pocos minutos de iniciada.
Padrón, quien es oriundo de Montalbán, estado Carabobo, prosiguió su homilía resaltando que los venezolanos ya no alcanzan a ver el horizonte porque el futuro y el destino están comprometidos, lo que provoca que la incertidumbre aturda las mentes y la tristeza rompa corazones.
“Pero el baluarte de la fe y la esperanza en Cristo y María impiden que la tristeza nos robe la alegría y el miedo las ganas de vivir… Acudamos con devoción a su maternal asistencia hoy, mañana y pasado, porque ella está en el comienzo y el final del camino de nuestra historia. Ponemos nuestras penas, especialmente la de los más pobres, a nuestra ciudad y sus instituciones”.
Virgen de Venezuela
La devoción por la Virgen del Socorro está en aumento. El cardenal aseguró que no se trata solo de Valencia ni de Carabobo, sino de toda Venezuela.
“Ella es amparo seguro para todo el país, es una sola y es la misma en el Valle del Espíritu Santo en Margarita, en el misterioso relámpago de Catatumbo, en la Plaza de Consolación de Táriba, en la apacible Divina Pastora del centro occidente y en la llanera Virgen de Coromoto en el santuario mariano nacional de Guanare”.
Recordó cuando se atribuyó a un misterioso intercambio de cajas la presencia de la imagen de la Virgen del Socorro en Valencia, “como sentenció el poeta Andrés Eloy Blanco: del Perú pidieron cambio, pero virgen no se cambia, por eso, Virgen María Valencia te quiere, Valencia te ama, Valencia te aclama, tienes que reinar”.
Desde el comienzo de su homilía fue insistente en que la imagen de la patrona de Valencia no se adora, se venera, y Dios no se opone a ello.
“No nos escandalicemos como otros de nuestras imágenes religiosas, ellas no compiten con su divinidad, por el contrario, expresan el misterio divino con signos y símbolos. Nos hablan de la presencia divina, de su compañía vistosa y protectora”.
El cardenal celebró el día como de fiesta mariana de la iglesia valenciana, al tratarse de la primera virgen coronada en Venezuela, en 1910, por el papa Pío X, y dijo que, conservando intacta la fecha del 13 de noviembre, se puede establecer la fiesta popular en el segundo domingo de noviembre como fue tradición y mandato real desde 1617.
Siete mil personas
Al finalizar la misa, el párroco de la catedral de Valencia, Pedro De Freitas, expresó su agradecimiento por la participación de la feligresía, calculada en alrededor de siete mil personas.
“Ese es un motivo de alegría a pesar de las limitaciones, de que sea lunes y que no sea feriado en Carabobo”. Resaltó que hay instituciones públicas que han contribuido más que otras y que este año fue difícil realizar la celebración, por lo que agradeció a la alcaldía de Valencia por el apoyo. “Hoy se abrió por fin la Plaza Bolívar”. También dio las gracias a la alcaldía de San Diego por siempre estar presente en la festividad.
La imagen de la virgen estuvo vestida por un traje azul con dorado del diseñador Alejandro Fajardo, y sutilmente decorada con orquídeas naturales, donadas por la Asociación de Cultivadores de la flor nacional.
Durante la eucaristía se disfrutó de las melodías del coro arquidiocesano dirigido por Ana Virginia Oviedo, y de la Banda Sinfónica 24 de junio. La misa estuvo asistida por todo el clero arquidiocesano y con la presencia del obispo de Guarenas, Tulio Ramírez Padilla, y monseñor Nelson Martínez, obispo emérito de San Felipe.
Peticiones a la virgen
Los problemas de servicios públicos fueron prioridad entre sus peticiones a la virgen para el administrador apostólico de la arquidiócesis de Valencia, monseñor Saúl Figueroa. “Cada vez están más debilitados, el agua, la luz, teléfono, transporte, y eso depende de todas las autoridades”.
Destacó que en el poco tiempo que tiene en la capital carabobeña le llama la atención que casi todas las personas tienen pozo. “Yo no sabía que en Valencia era tan malo el servicio del agua que se necesitan pozos, y hay que pedir mucho por eso porque son las necesidades más perentorias”. Pidió que las oraciones en este día estén enfocadas también en el cese de las guerras para poder vivir en paz.
El alcalde de Valencia, Julio Fuenmayor, a su llegada al Fórum, manifestó su alegría por las bendiciones de la Virgen del Socorro y su petición fue fortalecer la institución de la familia.
Para el presidente de la Cámara de Pequeños y Medianos Industriales y Artesanos de Carabobo (Capemiac), Isaac Pérez Yunis, es un honor acompañar esta tradición con toda la sociedad civil carabobeña y sus oraciones estuvieron enfocadas en reactivar el aparato productivo del país y seguir creando valor empresarial con inversión y mano de obra venezolana.
León Jurado Laurentín, alcalde de San Diego, recordó que este 13 de noviembre no solo se celebra el Día de la Virgen del Socorro, sino también el de San Diego de Alcalá, patrono del municipio, por lo que a las 5:00 p.m. se celebrará una misa en su honor con homilía del cardenal Diego Padrón.
Al finalizar la misa, la imagen salió en procesión por la avenida Bolívar, donde infinidad de personas saludó a la Patrona de la ciudad, mientras bandas de varios colegios la acompañaban entonando distintas canciones.
Una de ellas fue la banda del Colegio La Salle, que acaba de cumplir 70 años y cuyos 83 integrantes desfilaron a lo largo de la amplia avenida entonando canciones en homenaje a la virgen.