El cardenal Baltazar Porras expresó su solidaridad a la comunidad de los monjes trapenses y rechazó los hechos vandálicos que allí ocurrieron el jueves pasado, cuando un grupo de delincuentes asaltó a 30 personas.
Plácido Álvarez y Juan Diego Warren, en representación de quienes viven en el monasterio de los trapenses, agradecieron el gesto de humildad y solidaridad de los miembros de la Arquidiócesis de Mérida.
Para el cardenal, la violencia y el terror social, aunado con el desamparo que viven los venezolanos, se ve en todos los rincones de la nación cuando la inseguridad, la falta de alimentos, medicinas y un hampa desbordada tienen arrinconados a los ciudadanos, sin ayuda de nadie.