Primera Mesa de Diálogo de los sectores cultura y religión de Naguanagua se llevó a cabo en el salón de sesiones del Concejo Municipal con el fin de escuchar las propuestas de artistas, cultores, pastores y representantes de la religiosidad popular o del pueblo, quienes coincidieron en la necesidad de reapertura de algunos espacios en la localidad.
Pastores de distintas iglesias solicitaron la reapertura de templos e iglesias para poder continuar con su labor, mientras que el sector cultural solicitó la recuperación de museos o auditorios, además de crear una orden que lleve el nombre de algún cultor importante y que se reconozca a los artistas y promotores del quehacer cultural en la jurisdicción.
Planteamos la creación de un fondo económico para apoyar al sector cultural, que derive de los impuestos y sea de carácter obligatorio, comentó Carina Campero, miembro del comité organizador del Encuentro de Teatro Popular Latinoamericano (Entepola).
Efectos del confinamiento
El pastor de la Iglesia Misionera Nueva Jerusalén, Carlos Suárez, expresó que la pandemia del COVID-19 ha generado efectos colaterales en las familias venezolanas.
El gobierno debe atacar desde diferentes flancos, no solo atacar el virus. El confinamiento esta generado situaciones difíciles, precarias, alrededor de las familias, por eso creemos que hay un daño superior al del virus. Debemos ser amplios y ver lo que está alrededor de la enfermedad, dijo Suárez.
El representante de la Asociación Nacional de Sacerdotes de IFA, Diógenes Díaz, calificó de positivo que estos encuentros tengan fundamento en el concepto pluricultural de la Constitución Nacional y comentó que para seguir llevando a cabo cualquier diálogo debe prevalecer la tolerancia y el reconocimiento a la diversidad.
Nota de Prensa