Los Medias Blancas de Chicago se reforzaron este jueves con el segunda base venezolano César Hernández, proveniente de los Indios de Cleveland, en un traspaso que se dio a cambio del lanzador de las ligas menores Konnor Pilkington.
Así, los Indios tiraron la toalla en su intento de alcanzar el título de la División Central de la Liga Americana, cerrando este traspaso con un rival directo como los Medias Blancas.
«Hicimos el traspaso que pensamos que tenía más sentido para nosotros y esta es la dirección que tomamos», indicó el presidente de operaciones deportivas de los Indios, Chris Antonetti.
A su vez, reiteró que debían ser realistas y admitir que los Medias Blancas estaban por delante de ellos en la clasificación con una clara ventaja que les harían buscar los refuerzos que necesitan para asegurar el título.
«Tratamos de mejorar como equipo y los Medias Blancas si no conseguían a César, estamos muy seguros de que habrían adquirido a otro pelotero talentoso de otro equipo», valoró el presidente de operaciones de los Indios.
Los Medias Blancas, que tienen una ventaja de 8,5 juegos sobre los Indios e inician una serie ante ellos el viernes, han estado buscando un segunda base desde que el titular en la posición, Nick Madrigal, sufrió un desgarro de tendón de la corva.
El intercambio interdivisional creó una situación extraña. Dado que los Indios jugarán este fin de semana en Chicago, el equipo aceptó transportar a Hernández antes de enfrentar al venezolano por primera vez.
Con la llegada del venezolano, Chicago recibe a un defensor de Guante de Oro capaz de iniciar ofensivas y remolcar carreras con el veterano entrenador Tony La Russa. El pelotero criollo promedia .231 en su segunda temporada con los Indios, al pegar 17 cuadrangulares y 47 carreras producidas en 96 partidos que ha disputado.
