Miles de simpatizantes del Gobierno de Venezuela se movilizaron este jueves en Caracas hacia la Asamblea Nacional (AN, Parlamento), en rechazo a lo que consideran un «golpe parlamentario» por parte de la Cámara, que inició este miércoles un proceso de remoción de siete magistrados del Supremo.
Desde varios puntos del centro de la capital venezolana, los chavistas se dirigieron al Parlamento alegando que este -que aún mantiene un desacato impuesto por el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ)- viola la Constitución al intentar destituir a los magistrados.
Esta movilización se llevó a cabo en paralelo a otra manifestación que la oposición dirigió desde la autopista Francisco Fajardo, principal arteria vial de la ciudad, a favor del Parlamento y hacia la Defensoría del Pueblo.
La marcha opositora, a juicio del primer vicepresidente del gobernante Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), Diosdado Cabello, intenta «despojar, sin éxito» y «desalojar del poder al presidente, Nicolás Maduro.
Indicó que el pueblo chavista no se va a mover de las calles hasta tanto no haya paz en el país, y acusó a los opositores de intentar promover un cambio de Gobierno por la vía violenta.
Estamos hablando de gente que está dispuesta a matar a otra persona con tal de lograr sus objetivos, insistió.
Por su parte, Alexander Vázquez, un simpatizante del chavismo, le dijo al estatal VTV que el Gobierno de Maduro es sumamente democrático, y pidió a los venezolanos mantenerse en pie de lucha para resistir la intención del Gobierno estadounidense de destruir el proceso político que inició Hugo Chávez en 1999.
La movilización oficialista se desarrolla sin contratiempos, entre música y banderas.
Por su parte, Efe constató que la Policía Nacional Bolivariana (PNB) usó bombas lacrimógenas y agua para dispersar a los manifestantes opositores en la autopista Francisco Fajardo, quienes intentaban llegar a la sede de la Defensoría del Pueblo en el centro de Caracas. Efe
