Fueron doce los presuntos delincuentes muertos durante el enfrentamiento en el sector La Guaricha, de Mariara en el municipio Diego Ibarra, suceso en el cual perdieron la vida dos funcionarios del Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas.
El director general del Cicpc, comisario general Douglas Rico, en compañía del jefe de la Región Estratégica de Investigaciones Penales, Redip Central del Cicpc, comisario general Luis Ollarves y el secretario de Seguridad Ciudadana y jefe de la región estadal Carabobo, comisario general José Domínguez, dijo en rueda de prensa que unos 60 funcionarios atendieron denuncias de la comunidad sobre una peligrosa banda criminal que se dedica al robo de vehículos, homicidio y extorsión en la zona
Rico detalló que luego de varios allanamientos, un grupo de funcionarios intentó ingresar a una residencia sin número, donde fueron atendidos por un hombre de aproximadamente 80 años de edad. “Este indicó a los funcionarios que no había nadie, ellos se confiaron y entraron a verificar, pero un hombre que se encontraba adentro le disparó a la comisión. Logró herir al inspector agregado José Rafael Cassiany Cáseres, con 17 años de servicio en la institución; y al detective Luis Alfredo Querales, quien tenía tres años de servicio. Lamentablemente ambos fallecieron en el lugar”.
El jefe del CICP narró que luego de disparar a Cassiany y a Querales, el antisocial accionó su arma contra el octogenario. Al llegar el resto de las comisiones fue neutralizado. Según el comisario Rico, 10 sitios del sucesos se originaron durante el enfrentamiento, la mañana de este viernes
Tras la pista de “Robert Guaricha”
Las comisiones buscaban en Mariara a los integrantes de la banda criminal liderada por “Robert Guaricha”. Tras el asesinato de los funcionarios fueron abatidos doce miembros de este grupo delictivo que atemoriza a la comunidad, pues se dedican a robar vehículos, extorsionar y matar. Rico aseguró que el líder de la banda está plenamente identificado por las comisiones, que se encuentran tras su pista.
Durante los allanamientos fueron decomisados dos fusiles solicitados, seis pistolas de diferentes calibres, entre ellas las armas de reglamento de los funcionarios fallecidos, cuatro revólveres, dos objetos explosivos, una granada fragmentaria, un radio trasmisor que era utilizado por los delincuentes para comunicarse entre ellos y varios cartuchos de fusil.