El órgano electoral de Venezuela negó este viernes que la renuncia de su vicepresidente pueda tener impacto en la organización de las votaciones parlamentarias del próximo 6 de diciembre, que boicoteará el grueso de la oposición, que las denuncia como un «fraude».
Alegando razones personales, Rafael Simón Jiménez renunció el jueves a la vicepresidencia del Consejo Nacional Electoral (CNE) y ya se designó, vía sentencia judicial, un sustituto: Leonardo Morales, procedente del partido político del disidente chavista Henri Falcón, la organización centroizquierdista Avanzada Progresista.
«La renuncia del exrector no afectará el desarrollo del proceso», aseveró el CNE en Twitter y sostuvo que Jiménez mantuvo «buena relación» con el resto de la directiva.
Reemplazo anunciado
A su vez, en una sentencia publicada este viernes en su web, el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), anunció la designación de Morales como rector y vicepresidente del ente comicial una vez «verificada la falta absoluta».
El actual directorio del CNE había sido designado el pasado 12 de junio por el TSJ, de línea oficialista, que declaró una «omisión» del Parlamento, único poder controlado por la oposición en Venezuela, en su atribución de escogerlo.
Por ello, la unicameral Asamblea Nacional tildó de «ilegal» ese procedimiento y una treintena de partidos opositores se niegan a participar en los venideros comicios legislativos.
Abrams instó a seguir reconociendo a Guaidó
Desde la jefatura del Parlamento, el opositor Juan Guaidó reclamó en enero de 2019 la presidencia encargada del país caribeño con reconocimiento de medio centenar de gobiernos, encabezados por el de Estados Unidos.
El martes, el principal diplomático de la administración de Donald Trump para asuntos venezolanos, Elliott Abrams, dijo esperar que los países que reconocen a Guaidó sigan haciéndolo incluso si el dirigente queda al margen de las parlamentarias.
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