Estudiantes de Mérida buscará puntuar ante Racing para clasificar a la Sudamericana. / Foto archivo

El ariete colombiano Wilson Mena marcó un gol y generó un penalti a los 96 minutos, cuando expiraba el partido del Grupo F de la Copa Libertadores, y Estudiantes de Mérida, que llegó a estar en desventaja en casa por 0-2, se impuso por 3-2 este miércoles en el estadio Metropolitano de Mérida.

El resultado da los primeros tres puntos de nueve posibles al conjunto venezolano y hunde al peruano en el último lugar sin puntos.

El grupo lo domina Racing y Nacional con dos victorias en igual número de presentaciones. La jornada se cerrará este jueves en campo del equipo argentino.

Mena, que saltó desde la banca, niveló a 2 el marcador al transformar en gol un certero pase de Jesús Meza, cuando el cuadro peruano lucía cómodo sobre el césped del Estadio Metropolitano.

Cuando se jugaba el tiempo de reposición, el delantero recibió la bola en el borde del área, encaró con velocidad hacia el arco de Butrón y fue derribado por el zaguero venezolano Rubert Quijada, provocando el penalti que José Rivas cambió por gol a los 97.

«Se dio entrar y aportar un granito de arena, gracias a Dios pude hacer un gol y generar una acción más», expresó satisfecho el antioqueño de 33 años, tras finalizar el encuentro.

El otro tanto de Estudiantes de Mérida lo anotó Édson Rivas a los 64 minutos, con un potente remate al borde del área.

Antes, había sido Alianza Lima el encargado de dar emoción al duelo, gracias a cinco minutos de magia del volante Arroé.

El peruano apenas si inquietó a la defensa local en la primera mitad, pero en el inicio del complemento protagonizó dos internadas por la banda izquierda que terminaron en goles para la visita.

Primero, con un rápido acarreo que el defensor venezolano Ronaldo Rivas solo pudo contener con falta dentro del área, para la diana desde los doce pasos de Alexi Gómez a los 51 minutos.

Tres minutos después, Arroé calcó la jugada anterior y encaró a Rivas de nuevo por la izquierda, pero remató con la derecha antes de que el venezolano pudiera siquiera incomodarle, incrustando el balón en el ángulo izquierdo de la valla que defendió Araque.

Esa ventaja 0-2, que lucía insalvable para Estudiantes a los 54 minutos, era un premio excesivo para Alianza, que en la primera mitad no supo contener los bríos del combativo equipo local.

En el arranque solo la mala puntería y dos oportunas intervenciones de Butrón impidieron que el equipo académico abriera el marcador, mientras que Alianza reaccionaba con lentitud y no llevó peligro real al arco rival.




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