Comerciantes de Táchira denunciaron que funcionarios de las FAES les amenazaron con armas y granadas
FAES / Foto referencial: Archivo

La noche del pasado 22 de enero, funcionarios de las Fuerzas de Acciones Especiales (FAES) de la Policía Nacional Bolivariana presuntamente ingresaron a un sitio de comida en San Cristóbal, estado Táchira, y detuvieron a una persona por supuestamente estar grabando un operativo que realizaban en una zona aledaña.

Señala la web de El Pitazo que, entre los afectados figura Laura Hurtado, médico pediatra y propietaria de un local de comida, quien narró a través de sus redes sociales la situación de la que fue víctima.

“Quiero denunciar a los funcionarios de las Faes que entraron al local y empezaron a arrebatarnos el celular a los que estábamos allí. A un joven que se opuso, lo golpearon. Al yo intervenir y reclamar por esa acción, uno de esos sujetos sacó una granada y me la puso en la cabeza, diciendo que la iba a explotar”, reseñó Hurtado desde su perfil de Instagram, mensaje que empezaron a replicar a través de otras plataformas como Twitter.

Amenazas y golpes

Precisó la afectada que los funcionarios de las Faes tenían armas largas, cortas y granadas, y no solo la golpearon a ella, sino a todos los presentes. Además decomisaron los celulares de las personas y entre gritos les decían que no podían grabar nada.

En uno de los videos difundidos por Hurtado, esta publica una foto donde aparece un hombre con Freddy Bernal, diputado a la Asamblea Nacional de Nicolás Maduro, a quien precisa como hijo del político. Según ella, el individuo la amenazó de muerte.

Golpeado salvajemente

Por su parte, Nicola Di Gioia, otro de los comerciantes afectados, denunció que al intervenir en el problema, los funcionarios de las FAES lo golpearon salvajemente.

“Me llevaron preso y me torturaron. Me echaban alcohol en los ojos, me colocaron una granada en el pecho, le quitaban el seguro y me la volvían a poner. Me daban con las cachas de las armas. Fue aterrador. A Dios gracias no pasó a mayores, pero ellos parecían estar bajo los efectos de las drogas y el alcohol. Actuaron de manera violenta. Al vigilante del sitio hay que operarlo porque lo hicieron saltar de un segundo piso”, narró Di Gioia.

El comerciante puso la denuncia formal en la Fiscalía, donde acusó al supuesto hijo de Freddy Bernal y al familiar de un jefe de las FAES. Indicó que desde el incidente los funcionarios del mencionado cuerpo han ido constantemente al negocio y teme no poder ir más al sitio de comida del que es propietario y que atiende personalmente.

Con información de El Pitazo.




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