Al término del lapso señalado del 1ro de septiembre 2020 por la Comisión de Encuesta de la Organización Internacional del Trabajo, esta institución formuló y solicitó acatar unas series de recomendaciones, a favor de las relaciones laborales en el país, pero es poco lo que el gobierno de Maduro ha hecho en su cumplimiento, y a favor de generar un clima de paz laboral y de respeto a los actores laborales.
El doctor Julio García, quien formó parte del proceso, señaló que el informe elaborado por la comisión, es único en su contenido y estilo para el país, en los cien años de la OIT. Dijo que sabiamente el instrumento se le denominó, “Por la reconciliación nacional y la justicia social en la República Bolivariana de Venezuela”.
García expresó que, desde lo microsocial, los trabajadores y sus representaciones, ven lejos ese propósito. Observan también que impera y se acrecienta desde el aparato gubernamental, la imposición de condiciones laborales.
Asimismo se desconocen a los actores laborales, se incumplen los principios laborales de progresividad, igualdad, no discriminación. Se amenaza, estigmatiza y se toman represalias contra los actores disidente y de pensamiento libre que rete al régimen. Es decir, la desconstrucción de modelo libre, democrático y de justicia social previsto en la constitución.
Julio García explicó que la referida comisión generó cuatro ejes en sus recomendaciones, para ser cumplida al término del 1ro de septiembre de 2020. Son estas: 1) Cese de las violaciones y persecuciones; 2) Pleno respeto de la autonomía sindical; 3) Dialogo tripartito; y 4) Mesas de diálogo social. En estos, se recogen planteamientos cumplidos y otros incumplidos.
Indicó que favorecidos con los planteamientos de la comisión, se conoce que la Alianza Sindical Independiente, conquisto su boleta sindical por parte del Ministerio del Trabajo, ubicándose en las pocas centrales de trabajadores vigentes; esto producto a las exigencias de la CE-OIT.
Referido a libertades, el líder Rubén González (dirigente de Ferrominera) fue puesto en libertad recientemente, por una medida de indulto presidencial, motivado está a presiones políticas. En todo caso se demuestra que la prisión que cumplía, es derivada a temas de represión de naturaleza política.
INCUMPLIMIENTO DE LAS RECOMENDACIONES
García señaló que la lista de incumplimientos de las recomendaciones de la OIT es larga. El Estado por vía del gobierno mantiene en incumplimiento: el “cese inmediato de todos los actos de violencia, amenazas, persecución, estigmatización, intimidación u otra forma de agresión a personas”.
Un ejemplo de ello es que sigue privado de libertad Rodney Álvarez, dirigente de Sintraferrominera.
Tampoco ha adoptado las medidas necesarias para asegurar el Estado de derecho, en particular la independencia en relación con el Poder Ejecutivo de los órganos de los demás poderes.
No cumple con las medidas necesarias para asegurar el pleno respeto de la autonomía de las organizaciones de empleadores y de trabajadores, en particular con relación al gobierno o a partidos políticos.
Tampoco ha eliminado la figura de la mora electoral y la reforma de las normas y procedimientos de elecciones sindicales, de manera que la intervención del CNE sea verdaderamente facultativa, no suponga un mecanismo de injerencia en la vida de las organizaciones, y se garantice la preeminencia de la autonomía sindical en los procesos electorales.
El declarante precisó que de lo citado, se desprende situaciones puntuales, concretas y públicas, que demuestra la no intención de apostar por una salida a la crisis.
“A decenas de trabajadores en el lapso de este informe, se le abrieron procedimientos judiciales y administrativos, entre quienes destacan periodistas, enfermeros y médicos, entre otros”.
De acuerdo a su apreciación, en el mismo lapso, no existe voluntad de promover, estimular y ejecutar acuerdos por las vías legales. La discusión de las convenciones colectivas desapareció, el reconocimiento de actores distintos al gobierno no existe, y el centralismo de acrecentó.
LA PANDEMIA Y EL INFORME
Subrayó que se conoce que el abordaje de progreso del informe se encuentra en un suspenso por la pandemia, por lo se aspira que los órganos e instancias de la OIT, retomen los efectos y consecuencias de los planteamientos señalados.
García refirió que en el ínterin de este proceso han aparecido esfuerzo para la recuperación del sistema productivo y laboral, acuerdos bipartitos entre Empresarios y Organizaciones de Trabajadores, reuniones, consensos, entre tantos otros incentivos.
Desde lo interno también nace una autocrítica, sobre la inoculación partidista, de extrema fragmentación laboral; por ello, el llamado a la unión de las fuerzas laborales democráticas, para apalancar el anhelado cambio de un verdadero sistema productivo de progreso y bienestar para todos.
