La inestabilidad constante del servicio de internet venezolano ABA Cantv, ha hecho que varias localidades tengan que recurrir a opciones distintas para poder acceder a los beneficios que ofrece la interconectividad.
Como informa el diario La Nación, en algunos casos de comunidades fronterizas con Colombia, los habitantes han llegado a contratar servicios del país vecino. Esto trae consigo varias desventajas, debido a que el proceso de adquirir los equipos es complejo y en conjunto con el precio mensual por hacer uso de sus funciones, resulta costoso.
En la parte alta del barrio, la mayoría no tiene internet, expresó Erika Arboleda, quien es miembro del Consejo Comunal del Barrio 5 de Julio. Esta localidad ubicada en San Antonio, estado Táchira, ha presentado problemas de conexión a la red desde hace tres años, según reseña el diario.
Un hecho curioso de la problemática, es que en el lugar, algunas familias han adquirido el servicio de interconectividad colombiano pero debido a los precios elevados que deben pagar por utilizarlo, decidieron permitir el acceso a otras personas a cambio de una mensualidad de 10.000 pesos colombianos por teléfono (el equivalente a un aproximado de 2,74 dólares).
Reiteramos el llamado a las autoridades competentes para que se acerquen y nos ayuden a solventar esta situación afirmó Arboleda, quien además lamenta que no haya habido intenciones de solventar el contratiempo, a pesar de comunicarle de diversas maneras a los organismos competentes la realidad que viven.
Marta Monsalve, quien también forma parte del consejo comunal de la zona, agregó que durante las noches los problemas de conexión empeoran, debido a la saturación producto de la gran cantidad de personas que hacen uso del sistema al mismo tiempo. Este hecho obliga a sus hijos a realizar sus tareas escolares en horas de la mañana, gracias a que la velocidad de la red mejora en ese punto del día.
Para estar comunicados, informados y responder a las tareas de los niños, necesitamos estar conectados, manifestó Arboleda.
La interconexión no es el único problema que padece la comunidad. Actualmente afrontan los problemas de la escasez del servicio de gas y ocasionalmente tienen inconvenientes con el suministro de agua. Además, deben lidiar con constantes cortes eléctricos a cualquier hora del día. A pesar de todo, los habitantes del barrio esperan que las dificultades cesen con el tiempo.
