Un incendio de poca magnitud que se registró la mañana de este lunes en el barrio El Vivero de Valencia, puso en evidencia las limitaciones logísticas que tiene el Cuerpo de Bomberos.
Los vecinos llamaron a los bomberos porque un cortocircuito produjo un incendio en una de las casas de la calle Infante, entre Sucre y Mariño. Sin embargo dos funcionarios acudieron luego de que un adolescente fuera corriendo desde la barriada hasta la estación número uno, ubicada en la avenida Branger, cruce con Lara. Estaban francos de servicio, pero como no había más nadie que atendiera la emergencia, ellos se fueron al lugar en moto y sin la indumentaria adecuada.
Al llegar a la vivienda, los dos bomberos juntos con los vecinos apagaron el incendio con tobos de agua. La dueña de la casa, María Hernández de Nieves, de 59 años y su nieva de tres estaban a salvo, sin embargo la mujer tuvo que ser trasladada a la Chet por problemas respiratorios.
Al sitio se presentó una unidad del Cuerpo de Bomberos de Guacara, y los funcionarios colaboraron pero ya el fuego se había extinguido.