Le llamaron la marcha de los “bragas rojas”. Un grupo de trabajadores contratados de la refinería El Palito caminó este miércoles desde la plaza El Zancudo, en Morón, hasta la refinería. Así lo habían decidido tras una asamblea el martes. La exigencia era precisa: que se honrara el pago de pasivos laborales correspondientes a los aumentos salariales decretados por el presidente Nicolás Maduro, pendientes de mayo y septiembre. Se trata de mil 912 empleados contratados de Petróleos de Venezuela (Pdvsa), precisó Juan Carlos Duno, vocero de la junta directiva del Sindicato Único de Trabajadores Petroleros y Químicos de Carabobo.
Los empleados están cesantes o inactivos. Su contrato ya expiró luego que fueran llamados para la reparación de la refinería. “Son mano de obra artesanal que trabajó durante el mantenimiento de la planta general”.
Al llegar al complejo refinador los trabajadores fueron recibidos por representantes de la gerencia de finanzas y de recursos humanos de Pdvsa. La semana pasada, tras una protesta en la vía, se les había prometido un pago que no se hizo efectivo. “Hoy consideramos que es un día de júbilo, pues se nos dijo que en el transcurso del día se hará efectivo la cancelación”. Duno lo calificó como una victoria.
Refinería podría arrancar pronto
Pasó más de nueve meses paralizada. El Palito, que surte de combustible a tres estados, atravesó un proceso de “mantenimiento mayor”, explicó Duno. Por eso se necesitó de mano de obra extra y contratada solo por los meses que iban a durar los trabajos, dijo al referirse a los más de mil 900 trabajadores a los que ya se les prometió una respuesta. Su desempeño fue fundamental, reconoció el dirigente. “La planta general FCC (fraccionamiento catalítico) —planta madre que produce gasolina— se encuentra en proceso de pre-arranque”
La refinería podría estar funcionando antes que termine el año, dijo Duno. El Palito es una de las cuatro refinerías que conforman el Tren Refinador de Venezuela, que completan las plantas de Amuay, Cardón y Puerto La Cruz.
