La crisis sociopolítica que atraviesa Nicaragua ha dejado 535 muertos en casi siete meses, en el marco de las protestas contra el presidente Daniel Ortega, informó hoy la Asociación Nicaragüense Pro Derechos Humanos (ANPDH).
El número de víctimas es superior a las 528 reportadas por la ANPDH el 22 de octubre pasado y se trata de un informe "todavía preliminar", según explicó su secretario ejecutivo, Álvaro Leiva.
Al igual que en informes anteriores, la ANPDH señaló que las personas murieron "en protestas cívicas como un derecho humano", frente al Gobierno de Ortega.
La cantidad de heridos también se elevó de 4.102 en octubre pasado a 4.353 en lo que va de noviembre, de acuerdo con la organización.
El Gobierno de Nicaragua hasta ahora ha reconocido 199 víctimas mortales.
La oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos (Acnudh) y la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) han responsabilizado al Gobierno de "más de 300 muertos", así como de ejecuciones extrajudiciales, torturas, obstrucción a la atención médica, detenciones arbitrarias, secuestros y violencia sexual, entre otras violaciones a los derechos humanos.
Ortega ha rechazado todas las acusaciones y se ha proclamado vencedor de un intento de "golpe de Estado".
Las manifestaciones contra Ortega y su esposa, la vicepresidenta Rosario Murillo, por unas fallidas reformas de la seguridad social y se convirtieron en una exigencia de renuncia del mandatario.