Generalmente cuando ocurren hechos que traen como consecuencia desánimo, desgaste, frustración y angustias producto de lo ocurrido en el 2016 al sector opositor en Venezuela, comenzamos a comentar y a hablar en búsqueda de soluciones o propuestas que enderecen el rumbo en sentido positivo de todas las ilusiones que no llegaron a feliz término.
es necesario que la mud sustituya a los actores políticos que han perdido credibilidad
En principio y en aras de no perder tiempo para los venideros procesos electorales, que es la estrategia del oficialismo, opino que la MUD y el sentido unitario de la misma son fundamental para el alcance y logros electorales que conduzcan a la transformación social de nuestro país. Cambiarle las siglas para el mismo objetivo es una pérdida de tiempo, pero si es necesaria la sustitución de algunos actores políticos quienes han perdido credibilidad ante la opinión publica opositora.
Es necesario que se incorporen en la toma de decisiones a otros factores de opinión tanto a nivel nacional como a nivel regional que aporten credibilidad, firmeza en sus planteamientos y eficiente comunicación con la opinión pública.
Lamentablemente, la MUD en sus respuestas estratégicas ha sido tardía en relación a las actuaciones del oficialismo, pareciese que carecemos de criterio estratégico. La MUD debe sincerar y evaluar el funcionamiento de su Sala Situacional, donde también debe retirar a los que no han demostrado capacidad estratégica e incorporar a nuevos estrategas ante el panorama que se nos presenta en el 2017, que es totalmente diferente al del 2016. Un ejemplo de ello es que el oficialismo ya ha cantado la posibilidad de invalidar la nueva Directiva de la AN y no se escuchan estrategias contundentes para frenar esa acción salvo uno que otro Tweet.
Otra amenaza cantada por el oficialismo es el trabar la relegitimación de los partidos políticos ante el CNE. A la fecha de hoy no se conoce la estrategia de los partidos políticos. Es comprensible que la oposición no pueda estar cantando sus estrategias pero las tardías respuestas en el 2016 y las lentas nos han llevado al adormecimiento popular y falta de credibilidad de algunos actores políticos.
Se impone que la MUD amanezca este 2017 con un mensaje de renovación y de claro compromiso colectivo para que enamore nuevamente a la población que creyó en ella y que necesita de ella.
Por una Venezuela libre y de los venezolanos… ¡manos a la obra!
