Un hombre llegó temprano en la mañana a poner una denuncia en la Policía de Libertador, luego que uno de sus caballos apareciera descuartizado.
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El delito ocurrió en el sector Pirapira de la parroquia Independencia, en el municipio Libertador. Una vez que el cuerpo policial inició la búsqueda en la zona, encontraron a unas cuadras de la hacienda un palo manchado de sangre, un cuchillo de unos 30 centímetros y una franela de rayas manchada de sangre.
Las pruebas fueron presentadas ante el denunciante, quien pareció reconocer la prenda de ropa y la vinculó con uno de sus trabajadores, lo que llevó al oficial a solicitar la presencia de cada uno de estos hombres. Uno de ellos mostró una actitud sospechosa que activó las alarmas de los funcionarios, quienes interrogaron al sujeto que luego confesaría ser culpable de los hechos.
Los datos expuestos en la minuta policial detallan que el delincuente responde al nombre de José Manuel Herrera Guzman, de 25 años.
Los efectivos presumen que Herrera vendería las partes del animal a distintas carnicerías de la zona
