El oficial del Departamento Correccional de Florida (FDC) que estaba prófugo tras resultar acusado del asesinato de un recluso durante su traslado desde una prisión estatal quedó detenido este viernes, informaron las autoridades.
El sargento Jeremy Godbolt, de 28 años, quedó arrestado por la Policía del Aeropuerto Internacional de Los Ángeles, indicó en un comunicado el Departamento de Cumplimiento de la Ley de Florida (FDLE).
Godbolt se suma así a sus compañeros Ronald Connor, de 24 años, Christopher Rolon, de 29, y Kirk Walton, de 34, arrestados este jueves por el asesinato de un recluso en la Institución Correccional de Dade el pasado 14 de febrero.
Todos ellos enfrentan cargos por asesinato en segundo grado, conspiración, trato cruel de un detenido y agresión agravada de un adulto mayor, Ronald Gene Ingram, de 60 años, quien murió tras supuestamente recibir una golpiza por parte de los oficiales.
El suceso ocurrió el pasado 14 de febrero durante el traslado de Ingram desde la Institución Correccional de Dade, situada al sur de Florida City.
Pero todo se complicó cuando antes de que lo sacaran de su celda en la unidad de salud mental el recluso arrojó orina sobre uno de los oficiales.
Golpeado hasta la muerte
Aunque lograron esposarlo, testigos informaron de que los tres oficiales acusados comenzaron a golpear al recluso antes de llevarlo a la camioneta de transporte, donde apareció muerto horas después cuando estaba de camino al centro correccional de destino.
El médico forense determinó que la muerte la causó un pulmón perforado que provocó una hemorragia interna. Además, el recluso presentaba lesiones en el rostro y el torso consistentes con una golpiza.
La fiscal estatal de Miami-Dade, Katherine Fernández Rundle, dijo este viernes en conferencia de prensa que el suceso ocurrió en una zona del correccional sin cámaras de vigilancia.
Pero sí mostró otras imágenes de video en las que, primero, se ve a Ingram caminando sin problemas y después otras donde los oficiales tienen que llevarlo dado que era incapaz de sostenerse en pie.
«La investigación del FDLE tiene evidencias suficientes para probar sin duda razonable que Ingram fue golpeado fuera de la línea de visión de la institución, donde no había cámaras de vigilancia», dijo Fernández Rundle.
El FDC es el tercer sistema penitenciario estatal más grande del país, con unos 80 mil reclusos, y es la agencia más grande de Florida, con 24 mil empleados. EFE
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