Al menos 18 civiles murieron y 27 resultaron heridos en el sur de Chad a causa de enfrentamientos armados entre agricultores y pastores durante la semana pasada, confirmaron hoy a Efe activistas de la sociedad civil y las autoridades.
La violencia estalló en el departamento de Lac Iro, en la región austral de Moyen-Chari, el pasado 13 de septiembre después de que un rebaño de bueyes arrasara los campos de un agricultor, que abatieron a tiros por pastores armados cuando trataba de echar a los animales del terreno, lo que desató los choques.
«Los números son altos en el bando de los agricultores. Hasta ahora, hemos contado 18 muertos y 27 heridos que fueron evacuados a centros médicos. También hay desaparecidos que todavía no hemos podido encontrar», dijo a EFE por teléfono Ngassouma Harou, presidente del Fondo de Solidaridad y de Ayuda Mutua Sara-Kaba (la etnia a la que pertenecen los habitantes de Lac Iro), una organización que trabaja por la convivencia pacífica en la región.
Mientras, el general Ali Ahamat Akabache, gobernador de Moyen-Chari, aseguró hoy a Efe que «desde hace dos días ha vuelto la calma, ya no hay enfrentamientos».
«Hemos desplegado a las fuerzas del orden en varios pueblos. (…) La Justicia abrirá una investigación», añadió Akabache.
Dieciocho muertos
Los choques entre agricultores y ganaderos en disputas por la tierra es uno de los conflictos más antiguos en la región africana del Sahel, agravado en los últimos años con el avance del desierto, la crisis climática y la disminución de tierras aptas para cultivar y alimentar al ganado, así como la circulación de armas entre la población civil.
La violencia intercomunitaria dejó al menos 309 muertos y más de 6 mil 500 desplazados en Chad entre enero y julio de 2021, según un informe de las Naciones Unidas.
El país se encuentra a la espera del inicio de un diálogo nacional de reconciliación para pactar las bases de una vuelta a un gobierno civil.
Chad está bajo el poder del Consejo Militar de Transición (CMT) desde la muerte en abril de 2021 del presidente Idriss Déby Itno -que gobernaba el país desde 1990- durante violentos enfrentamientos entre rebeldes y el Ejército chadiano.
Después de tomar el poder, el CMT, liderado por Mahamat Idriss Déby -de 38 años e hijo del difunto presidente- anuló la Constitución y disolvió el Gobierno y el Parlamento.
No obstante, Déby prometió la celebración de elecciones libres y democráticas en un plazo de 18 meses, tras un «diálogo nacional inclusivo» con toda la oposición política y los numerosos grupos rebeldes.
