El dólar sube y el hambre crece. Así de sencillo, como la suma 2+2=4, dijo este lunes el diputado de la Asamblea Nacional (AN), Omar González Moreno.
El parlamentario explicó que el impacto devastador de la depreciación del bolívar y la baja calidad de vida se produce en miles de hogares venezolanos.
González señaló que los desajustes cambiarios y la falta de una política económica coherente han hecho añicos al signo monetario nacional, empobreciendo aún más al ciudadano de a pie, reseñó La Patilla.
El parlamentario comentó que el venezolano, es en la actualidad, 600 veces más pobre que hace exactamente un año, debido a la devaluación del bolívar y al brutal incremento de los precios de los comestibles.
Omar González afirmó que cada vez aumenta más el número de hogares que solo comen lentejas y arroz, pues desaparecieron por completo de sus mesas las proteínas como la carne de res, el pollo, el cochino y hasta los huevos.
Más de dos millones de bolívares es el precio de un cartón de huevos, lo que es impagable para un trabajador que solo devenga el sueldo mínimo. Esta es la mejor descripción del hambre en Venezuela, lamentó.
La UDO
El Jefe de la Fracción Parlamentaria 16 de Julio le envió sus felicitaciones a la ‘Casa Más Alta’, la Universidad de Oriente y a todos sus egresados, alumnos y personal docente y administrativo y agregó que la UDO ha sido una víctima más de este desgobierno.
El parlamentario por Anzoátegui agregó que la principal casa de estudio superior del Oriente venezolano cumplió 62 años desangrada por el Ejecutivo Nacional; ha permitido el vandalismo y destrucción, envejecida por la falta de recursos y apoyo para mantenerse en pie formando a las nuevas generaciones de venezolanos.
González reconoció la valentía de todos los udistas al mantenerse en pie en las más dramáticas condiciones imaginables, pero hizo una advertencia: La verdad es que si no cambia el régimen, la UDO desaparece.
Trampa automatizada
El diputado indicó que la presencia de Smartmatic, encubierta con otros nombres para la farsa electoral del 6 de diciembre es la evidencia más clara de la automatización del fraude.
Después de cometer trampas reiteradas –señaló– aquí y en otras partes del mundo, regresa a continuar con su sucio negocio de rutina, como es el de escamotear resultados y la profesionalización de inflar la participación electoral a favor de los candidatos que les dé la gana, porque para eso le pagan.
Con información de La Patilla.
